Punk y mestizaje

Los 20 años de Kasba Music, “dando voz a los sin voz”

El batallador sello barcelonés, referente en punk y mestizaje, celebra sus dos décadas de actividad con una serie de ediciones en vinilo de álbumes con fuerte carga simbólica, empezando por el directo de Fermin Muguruza Kontrabanda grabado en 2004 en la sala Apolo

El impulsor de Kasba, Joni D.

El impulsor de Kasba, Joni D. / EPC

Jordi Bianciotto

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Se presenta como “el sello independiente más ecléctico de Catalunya” y lo cierto es que Kasba Music, si bien ha jugado un papel crucial en escenas como el punk y el mestizaje, luce un catálogo de 230 álbumes que abraza un amplísimo abanico de estilos, del hip-hop al flamenco, pasando por la canción de autor, el trap o el pop más hipersensible. Todo ello, atendiendo a una “línea filosófica y social, que no política”, apunta Joni D., su ideólogo y timonel, junto a su pareja Amparo Martín. “Hemos publicado discos por muchas razones distintas: porque creíamos que podían funcionar, pero también porque nos gusta la propuesta o por amistad”.

Mientras en el sector lleva años imponiéndose el modelo de 360º, donde los sellos manejan todo el entramado de negocio del artista (del ‘management’ al ‘merchandising’, los bolos y los derechos editoriales, todo en el mismo paquete), Kasba Music ha caminado en dirección opuesta. Durante un tiempo ellos eran también managers (con la marca Hace Color), pero en 2014 decidieron concentrarse en las grabaciones y en los derechos. “Intentamos trabajar como lo hacían los sellos independientes de los años 80 y 90”, explica Joni. Lo cual incluye ir renovando la confianza con el artista paso a paso. “Nunca hemos firmado un contrato de más de un álbum. Vamos disco a disco”

De Muguruza a Muguruza

Y, originales como son, celebran ahora su 20º aniversario… con más discos. Y en vinilo. Un total de once, todos ellos lanzamientos singulares llenos de carga emocional y simbólica. Uno cada mes, excepto en agosto, empezando por una grabación de tintes históricos, lanzada el pasado viernes, la que recoge, por primera vez en este formato, el concierto que Fermin Muguruza Kontrabanda ofreció en la sala Apolo en 2004, dentro del ‘Komunikazioa tour’. Una gira que resultó salpicada por los vetos de diversos ayuntamientos del PP, el de Madrid incluido. “Es uno de los mejores discos en directo que se han grabado nunca en el Estado español”, estima Joni D. “Y nos parece bonito abrir la serie de vinilos con este álbum y cerrarla, en diciembre, con ‘Topa Iñigo!’, de Segarroi”, añade en alusión al disco de homenaje a Iñigo Muguruza, el hermano pequeño de Fermin, fallecido en 2019. 

Entre ambos lanzamientos, un goteo de ediciones que van de la reivindicación del Joni D. músico con el disco póstumo de Pixamandúrries a la llamada feminista de ‘Dones/Mujeres en la Kasba’ (registros primerizos de Marinah, exOjos de Brujo, Amparo Sánchez o Xazzar, el primer grupo de Clara Peya), y de ahí al tributo a Jesús Arias de ‘Una bomba desactivada’, de TNT, el festín punk-hardcore ‘Catalunya explota’ y el testimonio del ‘underground’ valenciano de Maniática. Verán asimismo la luz en LP la grabación nunca publicada de Cristian Dios y tres discos relevantes del mestizaje condal: el estreno de La Kinky Beat (que fue la primera referencia de Kasba y de la que se vendieron en su tiempo 5.000 compactos), una antología de Color Humano (grupo pionero de esa escena) y la recopilación ‘Barcelona sound’, con temas tempraneros de bandas como La Pegatina, Cheb Balowski o Bongo Botrako.

Sentimiento y pragmatismo

Publican en vinilo, en parte, porque son unos sentimentales (“venimos de ahí, y seguimos escuchándolos a diario”), pero sobre todo porque estos representan una admirable cuota de mercado. “En el primer semestre de 2023, el 80% de nuestra venta física fue en ese formato, y solo el 20% en CD”, revela Joni D., agitador de largo recorrido, que en los 80 y 90 formó parte de diversas bandas punk, como Anti/Dogmatikss y Juanito Piquete y los Mataesquiroles, y autor de libros como ‘Que pagui Pujol (una crònica punk de la Barcelona dels 80)’, que publicó en 2010. 

Joni D., o Joni Sahún, o Joni Destruye (su viejo nombre de batalla), sabe que el destino de sus artistas es que los acaben abandonando cuando comienzan a despuntar para fichar por un sello más grande. “El patrón que más se repite es dejar Kasba tras el tercer disco. Pasó con Lágrimas de Sangre, La Pegatina, Ginestà…. Pero para nosotros es una realidad asumida desde el principio y un orgullo”. El propósito sigue siendo “dar voz a los sin voz”. ¿Husmeando también en las nuevas tendencias sonoras? Sí, pero con prudencia. “No queremos que nos vean como los viejos que les quieren levantar la pasta”.