El Liceu rinde homenaje a la gran pianista Alicia de Larrocha

La conmemoración de los 100 años del nacimiento de Alicia de Larrocha (Barcelona, 1923-2009) tiene una cita importante este domingo en el Gran Teatre del Liceu, que rinde homenaje a la virtuosa pianista con un concierto en su honor. El maestro Josep Pons, la Simfònica del Gran Teatre -que ha brillado en el debut de la temporada con 'Eugene Onegin'- y el fantástico pianista andaluz Javier Perianes serán los encargados de un ambicioso programa Beethoven: el 'Concierto para piano núm. 5 Op.73 en Mi bemol mayor' más conocido como 'Emperador', muy interpretado por la célebre pianista, y la 'Sinfonía núm. 7, Op. 92 en La mayor'.

De Larrocha tocó como nadie la música española y brilló con sus interpretaciones de Beethoven, Schubert y Mozart. Su 'Iberia' de Albéniz es todo un referente, pero también dejó huella tanto por su comprensión de la música de Granados, Turina, Falla como por sus ganas de conectar con la música de su tiempo con el estreno de obras que Montsalvatge, Mompou y Suriñach escribieron para ella.

Durante su intensa vida profesional De Larrocha actuó en los mejores auditorios y teatros del mundo. En el Liceu actuó en ocho ocasiones. La primera vez, a los 16 años; la última, en 2002, cuando tenía 79 años. Alicia de Larrocha ha sido una de las pianistas más brillantes del siglo XX, una auténtica leyenda. Apreciada por su virtuosismo y profundidad interpretativa, su legado perdura a través de las muchas grabaciones de esta aclamada artista de manos pequeñas que se crecían ante las teclas.

Javier Perianes, el pianista tranquilo

A lo largo de su carrera ganó numerosos premios y distinciones. Recibió el Premio Nacional de Música y cuatro premios Grammy. Actualmente, están expuestos en el Palau Robert en una magnífica y gratuita muestra titulada 'Aquella eterna admiració', que repasa su legado y su amistad con otra leyenda de la música catalana, la soprano Victoria de los Ángeles. Vale la pena visitarla antes o después de asistir al concierto de este domingo. Permanecerá abierta hasta el 7 de enero de 2024.

Alicia Torra de Larrocha, presidenta de la Asociación Alicia de Larrocha e hija de la célebre pianista está encantada con el eco que el centenario de su madre está teniendo en el mundo entero. "Mi madre era una persona discreta. No buscaba la fama. Estaba centrada en la música. Hacía lo que le gustaba sin atender a todo lo que supuestamente rodea la vida de una artista, algo que no agradaba demasiado a su representante", recuerda su hija.

El centenario Alicia de Larrocha celebra el legado de la excelsa pianista

En su mundo

Pons que la había tratado y trabajado con ella en varios conciertos recuerda que "pese a tener un gran salón en su casa, ella era feliz en un pequeño cuarto donde repasaba las partituras". Tanto él como su hija recuerdan que nunca fue tan mediática como Pau Casals, Montserrat Caballé o Plácido Domingo aunque era todo un referente en su mundo, venerada por grandes artistas y directores. "La música clásica no mueve masas y a mi madre nunca le importó si la reconocían o no cuando iba a los sitios". Pero en las salas y festivales más importantes su recuerdo sigue vivo y muchos son los artistas jóvenes que tienen a De Larrocha en un pedestal, como ocurre con De los Ángeles. "En Bayreuth y en el Carnegie Hall la gente se arrodilla cuando las nombras", apunta Pons.

En la época en la que De Larrocha triunfaba el mundo del piano estaba dominado por los hombres. En su tiempo había pocas mujeres, principalmente Clara Haskil (1895-1960) y Rosalyn Tureck (1914-2003), conocida sobre todo por sus interpretaciones de Bach. "Nunca escuché a mi madre hablar mal de nadie, tenía buena relación con todos sus colegas músicos", destaca su hija.

Tras recordar a la famosa pianista este domingo, el Liceu ya prepara un sonado homenaje para el centenario de la soprano Victoria de Los Ángeles. Se realizará el 6 de noviembre y en él participarán fantásticas cantantes admiradoras de su arte como Maria Agresta, Louise Alder, Dame Sarah Connolly, Joyce DiDonato, Juliana Grigoryan, Sabina Puértolas, Helena Ressureiçao, Fatma Said, Anne Schwanewilms, Iréne Theorin y Marina Viotti.