Nueva programación

El marqués de Sade y la Inteligencia Artificial, protagonistas del CCCB

El centro barcelonés presenta la programación para 2023 con dos grandes exposiciones y un bosque inmersivo inspirado en una obra de Rodoreda y las víctimas de las guerras

Exposición 'Inteligencia Artificial', del Barbican Centre, que se verá en el CCCB.

Exposición 'Inteligencia Artificial', del Barbican Centre, que se verá en el CCCB. / Tristan Fewings / Getty Images / CCCB

Anna Abella

Anna Abella

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Sade (1740-1814) sufrió tortura, censura y 27 años de prisión "por lo que imaginó y escribió"; escapó por los pelos de la guillotina y acabó su carrera montando obras de teatro en el manicomio de Charenton, en las afueras de París. Personaje polémico, revolucionario y liberador para unos, y pernicioso, corruptor y capaz de provocar conmoción y horror, para otros, su "figura compleja y ambivalente", según Jordi Costa, jefe de Exposiciones del Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB), protagonizará una de las dos muestras que marcarán la temporada 2023 del centro que dirige Judith Carrera. La otra gran muestra, ‘Inteligencia artificial’, abordará las potencialidades inquietantes y, a la vez liberadoras, de la tecnología y se preguntará dónde termina el ser humano y dónde empieza la IA

Carrera ha presentado este miércoles la programación del CCCB para 2023, un año que encaran con un presupuesto de 13.656.000 euros, un 15,7% más que en 2022, y tras un "feliz" 2022, en el que "se ha dejado atrás la pandemia y en el que el público presencial ha crecido un 24% respecto a 2021", con exposiciones como ‘Cervell(s)’, recién finalizada, que ha recibido 90.000 visitantes, y con buenas cifras en el ‘World Press Photo’ (que volverá el próximo noviembre), o en la del revolucionario psiquiatra Tosquelles, ahora en el Reina Sofía de Madrid.

Elemento del vestido confeccionado por Jean Benoît para la 'performance' 'Ejecución del testamento del Marqués de Sade', de 1959.

Galerie Les Yeux Fertiles – Collection Jean-Jacques Plaisance

Además del festival Kosmopolis, que volverá del 25 al 29 de octubre, dedicado a la literatura oceánica, y de numerosos debates, donde destacan los que ponen el foco sobre Rusia, con escritoras exiliadas, China, Irán y la idea de Europa, o sobre la crisis energética y ambiental del planeta, Carrera ha destacado, para julio, ‘Viatges i flors’, con la creación de un bosque inmersivo fantástico a partir de la obra del mismo título de Mercè Rodoreda con la que Cabosanroque planteará una reflexión sobre la guerra y sus consecuencias en las mujeres y niños. Será a través de la obra de la escritora catalana y de los testimonios de víctimas de la Segunda Guerra Mundial reunidos por la Nobel Svetlana Aleksievich.

El mal y la violencia

"Afrontamos un 2023 reivindicando la fuerza creadora, emancipadora y transformadora de la cultura ante un mundo marcado por la guerra y la destrucción del planeta. El CCCB se consolida como un espacio de pensamiento, ensayo y creación, que promueve la experimentación y la mirada crítica sobre el mundo", considera Carrera. Por ello, la nueva programación gira en torno a "las grandes cuestiones filosóficas de todos los tiempos, como el papel del mal y la violencia, o la libertad y el futuro de la condición humana en tiempos de algoritmos". 

El legado del libertino marqués

Tras la imperdible muestra recién estrenada, ‘Constelación gráfica’, sobre nueve autoras del nuevo cómic español, llegará, el 10 de mayo (hasta el 15 de octubre), la exposición sobre Sade, comisariada por Alyce Mahon y Antonio Monegal. La propuesta explorará las implicaciones estéticas, filosóficas y políticas del legado del libertino marqués en la cultura contemporánea y planteará, añade Costa, preguntas incómodas, como si hay que leerle como un filósofo serio, cuyos escritos promueven una libertad emancipadora y subversiva, o como "un novelista que se limita a construir fantasías extremas" y que muestra "la dimensión excesiva y violenta de la experiencia humana".

'DeepDream', de Alexander Mordvintsev, en la muestra sobre IA del Barbican Centre.

'DeepDream', de Alexander Mordvintsev, en la muestra sobre IA del Barbican Centre. / Tristan Fewings / Getty Images / CCCB

También recordará la importancia de Sade para el surrealismo y el resto de vanguardias del siglo XX, cuando nuevas generaciones de escritores y artistas le redescubrieron y evitaron que fuera olvidado. Guillaume Apollinaire, George Bataille, Salvador Dalí, Man Ray, Pier Paolo Pasolini, Simone de Beauvoir, Michel Foucault, Jacques Lacan, Mapplethorpe... muchos reflexionaron sobre él o adoptaron su filosofía transgresora y su mensaje revolucionario como un medio de liberación de las normas sociales y la moral. De hecho, "se desató un auténtico culto a Sade, que se utilizó para explorar los límites de la representación del erotismo y las prácticas sexuales no normativas, como el BDSM". En el siglo XXI ha sido invocado por artistas e intelectuales ‘queer’.  

¿Debemos temer a la IA?

En octubre, tomará el relevo expositivo ‘Inteligencia Artificial’, coorganizada con el Barbican Center de Londres y en colaboración con el Barcelona Super Computing Center. La muestra intentará responder a preguntas como si la IA es realmente capaz de aprender, si es creativa y sostenible, si es capaz de conocer el futuro mejor que el ser humano o de tomar decisiones por sí misma. Y lo más importante, si es así, ¿debemos temerla? El recorrido no olvidará los dilemas éticos que plantea por la posible amenaza para la privacidad, la libertad y la verdad