¿Qué fue de PSY diez años después del fenómeno ‘Gangnam Style’?

La vida del rapero surcoreano Park Jae-sang, conocido artísticamente como PSY, cambió por completo el 15 de julio de 2012: tan pronto lanzó el videoclip de Gangnam Style, un sencillo que formaba parte del EP Psy 6 (Six Rules), Part 1, se convirtió en un fenómeno viral. En perspectiva, fue la Macarena de la época. Su coreografía, que recibió el nombre del “baile del caballo”, caló tan hondo en el imaginario popular que hasta la parodiaron los astronautas y científicos de la NASA. Incluso, Barack Obama, entonces presidente de Estados Unidos, afirmó en una entrevista: “Creo que puedo hacer ese paso. Tal vez lo haga en privado para Michelle”.

El vídeo, que ahora acumula más de 4.611 millones de visualizaciones, fue el primero en la historia de YouTube en superar la barrera de los 1.000 millones de reproducciones. La hazaña supuso una dulce revancha para el artista. Sobre todo, después de que las autoridades de Corea del Sur prohibieran a los menores de 19 años comprar sus primeros dos álbumes -Psy from the Psycho World! y Ssa2, editados en 2001 y 2002, respectivamente-, alegando que sus letras eran demasiado explícitas y soeces. En menos de una década pasó de ser un paria a un héroe nacional.

Scooter Braun, el mánager de Justin Bieber y otrora de Kanye West, no dudó en ficharle en septiembre de 2012. La unión pronto dio sus frutos. Según Nikesh Arora, antiguo jefe de negocios de Google, en el último trimestre de ese mismo año el vídeo de Gangnam Style generó 8 millones de dólares en YouTube. El cantante y su discográfica, YG Entertainment, sólo percibieron la mitad de esa cuantía en sus cuentas corrientes. Sin embargo, cifras aparte, hay algo innegable: la pegadiza canción, más allá de homenajear el opulento barrio seulense de Gangnam en el que PSY nació en 1977, contribuyó a internacionalizar el K-pop mucho antes de que bandas como BTS o Blackpink dominaran el mundo.

No todo fueron alegrías para él. Tal como The New York Times publicó el mes pasado, la sombra de Gangnam Style le persiguió incansablemente. PSY se mudó a Los Ángeles para construir una nueva carrera a miles de kilómetros de su país natal. Pero, por mucho que lo intentó, nunca consiguió emular aquel gran éxito. A excepción de Gentleman -cuyo vídeo, en 2013, alcanzó 38,4 millones de reproducciones en YouTube en apenas 24 horas-, el resto de sus temas, como por ejemplo Hangover, a dúo con Snoop Dogg, pasaron inadvertidos en las listas de ventas. Debido a ello, volvió a Seúl para estar cerca de su esposa, la violinista y diseñadora de moda Yoo Hye-Yeon, y sus dos hijas gemelas.

En 2018 decidió independizarse de YG Entertainment. Ahora bien, al siguiente año fundó P Nation, su propio sello y compañía de entretenimiento. “Me gustaría compartir las cosas que he aprendido durante estos 19 años siendo PD, mánager y director de mí mismo. Permitidme crear un espacio para jóvenes que quieran alcanzar sus sueños con esfuerzo y sudor”, anunció en su perfil de Instagram. En la actualidad, cuenta con diez artistas bajo su tutela, como la boy band TNX o las raperas Jessi y Heize.

En una entrevista que concedió este 2022 a Billboard confesó que, aunque le asustaba la simple idea de tener que abandonar los escenarios, “siento otro tipo de satisfacción y felicidad” con el éxito de sus protegidos. Puede que ya no acapare los titulares de antaño, pero a día de hoy continúa siendo uno de los músicos más queridos en Corea del Sur. El pasado abril, sin ir más lejos, publicó su octavo álbum de estudio, Psy 9th, el cual incluye That That, un dueto con Suga de BTS. “Si vuelve a suceder lo de Gangnam Style, genial. Si no, que así sea. Por ahora, haré lo que hago en el lugar que me corresponde”, aseveró en The New York Times sobre su reinvención detrás de los focos.