Crítica de libros

Crítica de 'Sota la pluja': la escritura sensual de Anna Murià

Se recuperan los relatos que la escritora, marcada por el exilio en México, publicó entre 1946 a 1976

Murià

Murià / El Periódico

Valèria Gaillard

Valèria Gaillard

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Bajo el título 'Sota la pluja', Comanegra ha publicado los cuentos que la escritora Anna Murià (1904-2002) compiló en dos volúmenes, y que comprenden un período que va del 1946, con 'Via de l’est', al 1978, con 'El país de les fonts'. Editado y prologado por la escritora Mercè Ibarz, el compendio incorpora además dos relatos que Murià guardó para la novela 'Aquest serà el princip'i: 'Focs de ciutat' y 'Haima'. En conjunto permiten hacerse una idea acertada de la prosa a flor de piel de esta autora republicana exiliada en México, que vuelca en el papel muchos de los demonios de esos tiempos de sueños libertarios y de amor apasionado. En 'Sota la pluja', una mujer embriagada por la lluvia se deja llevar por sus instintos. En cambio, en 'La noia que no ha estat mai noia', la autora aborda un tema tan espinoso como los abusos a una menor con una naturalidad propia de la época.

La sensualidad, incluso el lirismo y la vena filosófica contrasta con una mirada nostálgica. Ese es el sabor de boca que deja 'El país de les fonts', que cierra el volumen. Murià es capaz también de sumergirse en la ciencia ficción en un cuento cargado del estupor que recuerda a la serie ''The Twilight Zone', de Rod Serling. Una de las piezas refleja una experiencia autobiográfica de la autora: 'No'. Aquí aparece el 'château' (la mansión de Roissy-en-Brie donde fue a parar un grupo de escritores tras la guerra y donde Murià conoció al que sería su esposo, Agustí Bartra) y permite hacerse la idea del ambiente que debía respirarse en esta mansión donde el sentimiento de derrota y desorientación no iba reñido con las pasiones más intensas. Porque de nuevo el amor, el amor carnal, toma la delantera, así como la búsqueda de la felicidad.

Suscríbete para seguir leyendo