Un histórico del cómic

Amenaza de desahucio contra Juanito Mediavilla, el guionista de Makoki

El coautor junto a Miguel Gallardo del mítico personaje del cómic 'underground' y de su pandilla, se verá obligado a dejar la casa familiar de Burgos en la que vive y donde se crio si no logra un acuerdo con la inmobiliaria que se lo alquila

Juanito Mediavilla (izquierda) y Miguel Gallardo, en el 2012, en el Gòtic de Barcelona.

Juanito Mediavilla (izquierda) y Miguel Gallardo, en el 2012, en el Gòtic de Barcelona. / JOAN CORTADELLAS

Anna Abella

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Pocos días antes del pasado 20 de mayo, a Juanito Mediavilla y a su mujer, Isabel, se les caía el mundo encima: iba a ejecutarse una orden de desahucio que les sacaría de la casa de Burgos en la que viven y en la que se crio desde que tenía cuatro años uno de los autores míticos del cómic ‘underground’. Ya le sitúa en el imaginario el solo hecho de ser autor de los mejores guiones de Makoki, aquel inolvidable quinqui salido del frenopático (ideado por Felipe Borrayo) que junto con pandilla de piltrafas del arroyo reflejó la Barcelona más lumpen, de delincuencia, sexo (chungo), drogas y (poco) rock and roll, gracias al que formó tándem con el dibujante Miguel Gallardo. Pero también fue creador de personajes como Juan Jaravaca o El Niñato en la época dorada de ‘El Víbora’. Después de que la noticia, avanzada por ‘Diario de Burgos’, empezara a correr por las redes gracias, entre otros, a diversos amigos y a su editorial, La Cúpula, el abogado del historietista logró ‘in extremis’ evitar el desalojo. Pero lo que parecía desactivado no lo estaba. Solo se había logrado ganar tiempo y ya les han comunicado nueva fecha para el desahucio, que si nada lo impide, se hará efectivo en seis meses. 

"Nos quieren sacar de aquí sí o sí. Estamos al día de pagos pero aprovecharon un fallo que tuve para sacarnos de esta casa, a la que llegué con mis padres en 1954", lamenta, vía telefónica, Mediavilla (Burgos, 1950). "Estuve 30 años haciendo lo que más me ha gustado hacer en la vida, historietas, y ahora, con 70, cuando uno cree que hay cosas que nunca le pueden pasar, pasan. A estas edades no te lo esperas. Estoy desesperado", explica con angustia el autor, a quien le cuesta seguir dibujando porque ha perdido mucha vista pero que sigue dándole a los pinceles desde su estudio-vivienda. "Sigo pintando, pero esta historia me tiene derrotado", confiesa el autor, que ahora está revisando cómo quedará el recopilatorio integral que La Cúpula publicará en septiembre con todas sus historietas, tiras y chistes del personaje de Juan Jaravaca, su álter ego en historietas de tintes autobiográficos bañadas de heroína.  

Tira protagonizada por Juan Jaravaca, álter ego de Juanito Mediavilla, que La Cúpula publicará en un recopilatorio en septiembre.

Tira protagonizada por Juan Jaravaca, álter ego de Juanito Mediavilla, que La Cúpula publicará en un recopilatorio en septiembre. / MEDIAVILLA

El error al que se refiere Mediavilla llegó después de que cambiaran la titularidad del contrato de alquiler, de renta antigua y que estaba a nombre de su hermana. "Nunca habíamos dejado de pagar. Durante seis meses dejaron de emitirnos el recibo y, al preguntar, nos dieron a entender que era cosa de la burocracia -explica Isabel, la mujer de Mediavilla-. Cuando nos llegaron todos juntos los pagamos puntualmente, pero con ellos venía la orden de desahucio". Pero nadie les informó de que para dejar sin efecto esa orden debían presentar en el juzgado la documentación conforme habían pagado los recibos atrasados. 

Por desconocimiento e ingenuidad no lo hicieron y el proceso judicial siguió su curso hasta que su defensa presentó un preconcurso de acreedores en otro juzgado que paralizó el desahucio previsto para el pasado 20 de marzo. Eso les permitió ganar tiempo pero la empresa propietaria ya ha solicitado que vuelva a ejecutarse el lanzamiento. 

Viñeta de 'Makoki'.

Viñeta de 'Makoki'. / MEDIAVILLA / GALLARDO

Mediavilla es uno de los históricos del cómic ‘underground’ español, ligado en los 70 y 80 a Barcelona con sus personajes e historias gamberras que además de en ‘El Víbora’ aparecieron en ‘Star’, ‘Hara Kiri’, ‘Rambla’, ’Caníbal’ o ‘Butifarra’. Ante ello, sus abogados alegan que es "un artista en activo, que aún genera obra pese a sus limitaciones físicas y de edad, pero al que le están privando de su lugar de trabajo, ya que su vivienda es también su estudio". Y apelan también "a la sensibilidad cultural de la Fundació La Caixa", ya que Building Center, la inmobiliaria propietaria del piso por el que el dibujante viene pagando un alquiler que no llega a los 300 euros, es filial de CaixaBank.

Oferta de compra

Con la ley de su parte, la inmobiliaria les ofrecía la posibilidad de comprarlo por 80.000 euros pero les retiraba la opción de seguir de alquiler. "A nuestra edad nunca pensamos en comprarlo. No podemos invertir tanto dinero y nadie nos daría un crédito. El problema es que no somos vulnerables. No tenemos hijos y yo cobro una pensión tras años de trabajar como enfermera en Barcelona y el País Vasco. A los que estamos con alquileres bajos nos quieren echar", señala su mujer. Mediavilla no cobra pensión porque no ha cotizado, solo tiene un pequeño piso heredado en la capital catalana que tiene alquilado y que ahora ha tenido que poner en venta para lograr liquidez. "A estas alturas de la vida lo último que queremos es luchar contra una inmobiliaria", coinciden. 

Viñeta del recopilatorio de Juan Jaravaca que publicará La Cúpula.

Viñeta del recopilatorio de Juan Jaravaca que publicará La Cúpula. / MEDIAVILLA

El hecho de no entrar en la categoría de "vulnerables" también ha implicado que la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Burgos no les ayudara en su recurso. El abogado del dibujante, Miguel Ángel Sebastián, es muy consciente de que "el desconocimiento de las leyes no eximen de su cumplimiento", pero él actuó como creía que debía hacerlo, sin mala fe, solo que "formalmente no avisó al juzgado de que había pagado porque cuando lo hicieron nadie les dijo que tenían que hacerlo y cuando quisieron comunicarlo los plazos habían pasado y no se podía recurrir". 

Mediavilla y su mujer, que cuentan con la ayuda de varios amigos que les vienen echando una mano para lidiar con esta situación, agradecen el apoyo y la solidaridad recibida y la repercusión en las redes sociales. "Solo quiero seguir viviendo de alquiler en la casa en la que mis padres me criaron matándose a trabajar".  

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