Emerald Fennell: una certera bomba del MeToo en los Oscar

Se ha convertido en la primera mujer que ha ganado el Oscar al mejor guion original con su ópera prima. Emerald Fennell. La última mujer en ganar esta categoría había sido Diablo Cody en 2008 por ‘Juno’ y antes, Sofia Coppola por ‘Lost in Translation’.

Sin duda, ‘Una joven prometedora’ era uno de los títulos más icónicos de esta edición de los premios de la Academia de Hollywood. Un valiente 'thriller' de venganza que se encarga de desenmascarar la cultura de la violación sobre la que se asienta nuestra sociedad. Su guion mezclaba con desparpajo y valentía un montón de registros y tonos, era arriesgado y repleto de ambigüedad, y tenía la virtud de funcionar como un reloj.

'Una joven prometedora': el #MeToo se cobra venganza

A sus 35 años, Fennell tiene un currículum de lo más variado. Es hija de un prestigioso joyero de la alta sociedad británica, su hermana Coco es diseñadora de moda, su madre ha trabajado en casas de alta costura y es escritora. Fue criada entre la élite, en uno de los mejores internados, el Marlborough College, pero pronto comenzó a interesarse por la interpretación y a los 15 años consiguió sus primeros papeles. Participó en algunas películas inglesas de prestigio hasta que consiguió hacerse un hueco en la ficción televisiva con ‘¡Llama a la comadrona!’. De ahí, a encarnar a Camilla Parker Bowles en la ya mítica serie ‘The Crown’ en su cuarta temporada.

Más allá de su faceta como actriz, Fennell siempre había tenido otras inquietudes, entre ellas, escribir relatos a medio camino entre el terror y la fantasía. En el rodaje de ‘Albert Nobbs’ (2011) coincidió con Phoebe Waller-Bridge, que también tenía ambiciones creativas que poco a poco pudo llevar a cabo, primero en ‘Crashing’, después en la celebrada ‘Fleabag’ y en ‘Killing Eve’. Para la segunda temporada de esta última serie, Waller-Bridge llamó a Fennell para que se incorporara al equipo de guionistas.

La primera vez que se puso detrás de una cámara fue para filmar el cortometraje ‘Careful How Yo Go’. Dos años más tarde ‘Una joven prometedora’ se ha convertido en una de las grandes películas que abordan el consentimiento sexual en la era del MeToo. La directora estaba embarazada de siete durante el rodaje y dio a luz tres semanas después, algo que recordó al recoger la estatuilla, agradeciéndole a su bebé que le dejara terminar la película.