'La marató de Nova York' vuelve a poner a prueba a Joan Negrié y Albert Triola

Lo más importante antes y después de salir a escena en 'La marató de Nova York' es hacer un buen calentamiento. Aunque la apariencia física de Joan Negrié y Albert Triola es envidiable, los años no pasan en balde y si hace una década, cuando se estrenó esta comedia dramática de Edoardo Erba en La Villarroel, ya notaban el esfuerzo físico que suponía, ahora el esfuerzo se nota todavía más. El tiempo pasa factura, reconocen ambos actores, que a partir del sábado recalan en el Aquitania con la reposición del montaje, dirigido de nuevo por Juan Carlos Martel. "Al empezar te sientes como si tuvieras que subir una montaña. Los primeros 10 minutos son los más duros. Acabamos con los gemelos muy cargados de estar todo el rato saltando sobre las puntas. Necesitamos un buen rato de ponernos crema y hacer estiramientos", reconoce Triola.

"Esta función requiere un rigor y una disciplina máximos. Nos estamos cuidando muchísimo porque el desgaste físico es brutal -añade su colega Negrié-. Hablar durante una hora sin que se note el cansancio es complicado". Es lo que tiene tener que aparentar durante una hora ser dos amigos que se preparan para realizar la famosa prueba de fondo. "Ahora con la madurez hay frases del texto que cobran fuerza", reconoce Negrié. Ambos intérpretes, amigos desde hace 20 años, agradecen haber podido trabajar todos estos años, incluso ahora en estos complicados tiempos complicados del covid-19: Negrié estrenó 'Els Gossos' y Triola 'Smiley. Després de l'amor'.

Cuestión de actitud

Negrié ha retocado la traducción de la obra, cuyo mensaje sigue siendo tan válido hoy como hace 10 años. "Esta pieza habla de dos maneras de conseguir tus objetivos", comenta. El texto es una metáfora de la vida llena de preguntas como ¿por qué corremos?, ¿por qué no nos paramos? Son preguntas que se formulan los protagonistas en este montaje donde Negrié encarna a Carles, un hombre fuerte y seguro de sí mismo partidario de conseguir aquello que se propone a cualquier precio. Su compañero de entrenamiento, aparentemente más débil y con más dudas acerca del reto que se han propuesto, cree que hay muchas formas de conseguir las metas que uno se plantea.

De momento, para Negrié y Triola, remontar la obra es todo un logro que permitirá comprobar su estado físico y su evolución artística. "Hemos madurado, con la edad eres más buen canal para que salgan las emociones, no las aprietas tanto para que salgan, sabes como dejar que afloren solas".