Luz verde para un futuro Pacto del Libro y la Lectura

No soplan excesivos vientos para la industria del libro, pese a que las condiciones generales en el que la ha situado la pandemia que están amenazando la bibliodiversidad del sector y especialmente a las librerías y las pequeñas editoriales.  Si el pasado martes durante la inauguración de la Feria Internacional del Libro Liber, el ministro José Manuel Rodríguez Uribes anunciaba la intención del gobierno de establecer un aumento de hasta 900 millones de euros para Cultura, la segunda sesión de hoy ha concretado más medidas como la puesta en marcha del tan ansiado por el sector Pacto  de Estado para el Libro y la Lectura, una reinvindicación de años. Así, en el segundo día del LIber, María José Gálvez, directora general del Libro y Fomento de la Lectura ha anunciando medidas de reactivación con el anuncio de un foro multilateral, una mesa en la que se puedan establecer distintas acciones y dinámicas “para materializar propuestas para el diseño de políticas públicas específicas del libro” cuya primera cita será el próximo mes de noviembre.

Para Gálvez, la Mesa del Libro “será un consejo permanente” formando por la Dirección General del Libro y Fomento de la Lectura, la Subdirección general y la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE). También promete que la mesa se subdividirá en grupos de trabajo “abiertos, ágiles, para hacer más eficiente su funcionamiento”. Para la directora es muy importante el aumento del índice de lectura de un 50 a un 57%  que se ha consolidado durante la pandemia.

Manifiesto por la Lectura

La aportación de la FGEE a esa diálogo es la presentación durante el segundo día del Liber del 'Manifiesto por la Lectura, elaborado por Irene Vallejo, autora de la celebrada ‘El infinito en un junco’, que ha escrito un texto magnífico concebido como un alegato que sirva para construir el pacto . Además de una defensa apasionada de los libros, el manifiesto incide en la idea de que el principal peligro al que se enfrentan es “la desidia, el olvido, la omisión, el descuido y la indiferencia de una sociedad que no sepa amparar los libros y los eslabones de esa cadena invisible que los salva”, formada por escritores, traductores, correctores, ilustradores, trabajadores de talleres, distribuidores, bibliotecarios y archiveros y finalmente por las escuelas que es donde se forman los lectores. “Sobre todo es imprencisdible cuidar a quien lee”.

La FGEE utilizará el manifiesto como una herramienta de trabajo frente a los gobiernos estatales y autonómicos, así como a los partidos políticos, convertirlo en la semilla y en la razón de ser del tal ansiado pacto.