El CCCB dedica el ciclo Gandules'19 a películas cuánticas

Durante el mes de julio han proliferado las sesiones de cine al aire libre que hemos detallado en esta misma sección. Sin embargo, llega agosto y la mayoría de estos ciclos han finalizado o están a punto de hacerlo. Afortunadamente, el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB) escoge este mes para hacer su oferta, de martes a jueves hasta el 22 de agosto y la entrada es libre. Y su programación es muy distinta a la que se ha podido ver en otros lugares. No ponen ni Bohemian Rhapsody ni Green Book, lo suyo es el cine de autor. Este ciclo ha sido comisariado por el crítico de cine Jordi Costa, nuevo jefe de exposiciones del centro.

Las populares Gandules'19, en honor a las tumbonas que llenan el Pati de Dones del centro donde se hacen las proyecciones, suelen guardar relación con la exposición principal del centro. Y este año coincide con Quàntica, así que nadie espere filmes fáciles, de digestión rápida, ya que la selección es sumamente arriesgada, con títulos incluso inéditos para público iniciado. Un buen ejemplo es el filme con el que empiezan esta noche, High life, de Claire Denis, con Juliette Binoche como protagonista compartiendo pantalla con Robert Pattinson, el Edward de la saga Crepúsculo. Un astronauta y su hija forman parte de una tripulación integrada por delincuentes que fueron enviados al espacio para estudiar los agujeros negros a cambio de conmutar sus penas. Allí, una extraña científica se dedica a realizar complejos experimentos de fertilidad. Es rara, rara y combina las escenas desagradables con otras más poéticas.

De David Lynch al cine tailandés

Y si hablamos de gente extraña a David Lynch no le gana nadie. Es el director de Twin Peaks: Fuego camina conmigo (mañana, miércoles), prolongación de la popular serie televisiva concebida como una especie de precuela que relataba la vida de Laura Palmer en los días previos a su asesinato mientras otra muerte misteriosa intriga a la localidad. Al reparto habitual de la teleserie se incorporaban dos cantantes: Chris Isaak y David Bowie. Hubo quien pensó que esta película serviría para aclarar las incógnitas que dejó. Inocentes, aún salieron más confundidos. El jueves llega la española Ayudar al ojo humano, compendio de cuatro historias centradas en el personaje del padre Julián que irá tropezando con todo tipo de personajes mientras intenta difundir la fe cristiana. Un filme estrambótico que combina el terror con el humor en un ambiente onírico.

El martes 13 podrá verse la multipremiada El tío Boonmee recuerda sus vidas pasadas, drama esotérico del tailandés Apichatpong Weerasethakul (el nombrecito se las trae). Un anciano enfermo decide pasar sus últimos días con sus familiares, pero allí se le empiezan a aparecer los fantasmas de sus difuntos. Ganó la Palma de Oro en Cannes y el premio de la crítica en Sitges, pero su ritmo excesivamente lento para algunos provocó alguna que otra deserción en las salas. Symbol (miércoles, 14) es una comedia fantástica japonesa que no se estrenó en nuestro país y que combina dos historias, la de un luchador mexicano enmascarado que se prepara para un importante combate y la de un joven nipón que despierta en una insólita habitación blanca repleta de sorpresas e intenta escapar de allí.

Japón, Irán y un filme de culto

También es japonesa la película del jueves 15, Mind game, un filme de animación que utiliza diversas técnicas para un cóctel visual muy atractivo aunque su trama sea un rompecabezas. Un joven es asesinado por los enemigos de la chica a la que ama pero desafía el poder de los dioses y regresa a la Tierra donde vivirá nuevas aventuras. El martes 20 viajaremos a Irán con Fish and cat, sobre unos chicos que se apuntan a un campamento para participar en un concurso de cometas. Pero también conocerán a unos extraños cocineros. El filme está narrado en un plano secuencia de… ¡134 minutos!

El miércoles 21 se proyecta Donnie Darko un filme más conocido, de culto, pero no por ello menos inescrutable. El protagonista es un modélico estudiante que un buen día recibe la visita de un extraño personaje que le asegura que ha sido escogido para llevar a cabo una misión divina. El chico descubrirá de su mano los secretos del universo al mismo tiempo que se van sucediendo una serie de inesperados acontecimientos que revelan el verdadero carácter de cuantos le rodean. La película, que se rodó en tan sólo 28 días, los mismos en los que transcurre la acción, contiene guiños cinéfilos a cintas como E.T., Un hombre lobo americano en Londres, La máquina del tiempo y La última tentación de Cristo. Y para acabar, un programa doble (jueves 22) que se abre con La jetée, corto apocalíptico de Chris Marker a partir del cual Terry Gilliam rodó Doce monos, y sigue con T’estimo, t’estimo de Alain Resnais sobre un hombre que es seleccionado para viajar en el tiempo pero algo falla y empieza a vivir los hechos aleatoria y repetitivamente sin poder volver al presente.

Un ciclo gratuito, en un marco espléndido y en buena compañía reservado a los espectadores más arriesgados, a quienes no temen intentar entrar en una película aunque al final no entiendan nada, que no les asusten las tramas más surrealistas o los ritmos más pausados. Solo para valientes. Estáis avisados.