CRÍTICA DE CINE

'Venganza bajo cero': entre la víscera y la reflexión

Estrenos de la semana. Tráiler de 'Venganza bajo cero'

Estrenos de la semana. Tráiler de 'Venganza bajo cero'. / periodico

Nando Salvà

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Sobre el papel, 'Venganza bajo cero' parece solo otro título más que añadir a la lista de 'thrillers'protagonizados por Liam Neeson en los últimos años sobre padres sedientos de retribución y dotados de una capacidad sobrehumana para ejercer la violencia. Pero lo cierto es que este remake de la cinta noruega 'Uno tras otro' (2014), dirigido como aquella por Hans Petter Moland, no pretende ser solo una versión nevada de Venganza (2007); aspira a algo más extraño y profundo.

A estas alturas Neeson podría cometer homicidios en pantalla con los ojos cerrados, pero aun así siempre resulta entretenido contemplarlo matar enemigos con eficacia extraordinaria. Mientras su personaje va acabando gradualmente con la banda de narcos responsables de la muerte de su hijo, el actor exhibe la misma impasibilidad aquí que en variaciones previas del papel. La novedad es que en 'Venganza bajo cero' el héroe poco a poco comprende que lanzar cadáveres al río no logrará reparar su vida.

No es esa la única forma que la película tiene de sortear nuestras expectativas. En realidad, Moland usa las convenciones del 'thriller' de venganza a modo de disfraz para llevar a cabo una parodia del género, echando mano del humor negro y la ironía para distanciarnos de la historia y así dejarnos ver qué vacías y ridículas son este tipo de historias. Sin embargo, al mismo tiempo sigue tratando de saciar la sed de sangre de sus espectadores más proclives a lo literal, y no logra equilibrar ambos objetivos como sí lo saben hacer los hermanos Coen y Tarantino. Por un lado, la voluntad burlona resta pegada dramática a los asesinatos; por otro, las manchas de gore emborronan la parodia.

Asimismo, 'Venganza bajo cero' da la sensación de prestar tanta atención a sus propias idiosincrasias que a cambio desatiende aspectos dramáticos básicos como el ritmo y la estructura; el relato acumula una serie de subtramas que solo sirven para distraernos de la 'vendetta'central, y en el proceso el héroe da frecuentes pasos atrás para ceder el foco a una serie de personajes apenas esbozados. Nada de eso, en todo caso, le impide ser uno de los 'actioners' más curiosos que Neeson ha protagonizado en bastante tiempo. Y, considerando las controvertidas declaraciones que hizo hace meses acerca de un incidente que protagonizó en su juventud -en las que admitió haberse lanzado a la calle dispuesto a cometer un acto de violencia racista-, posiblemente lo seguirá siendo bastante tiempo más.