CRÓNICA

Zahara, salvada por el pop en Apolo

La cantante de Úbeda salió triunfante de la peripecia galáctica de 'Astronauta' en el Festival Millenni

Zahara, en su concierto de la Sala Apolo, dentro del Festival Mil·lenni

Zahara, en su concierto de la Sala Apolo, dentro del Festival Mil·lenni / periodico

Jordi Bianciotto

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En ‘Astronauta’, Zahara se muestra perdida en el espacio como proyección de su reciente maternidad y su relación con el mundo, pero visto su pase de este sábado en Apolo cabría pensar que la cantante jienense está a salvo. Al final del camino, el pop la ha librado del cataclismo y le permite venirse arriba, hasta transformarse en la reluciente disco-diva que cerró la actuación en el Festival Mil·lenni.

El camino hasta el clímax no fue fácil ni lineal: en el nuevo repertorio abundan las baladas y las incursiones atmosféricas, reflejo de un supuesto desamparo cósmico. Piezas que crearon ambientes insinuantes, como ‘Multiverso’ y ‘Big bang’, o esa ‘Guerra y paz’ de altos vuelos a la que no pudo sumarse Santi Balmes, cómplice de la grabación.

Puesta en escena galáctica

Zahara y su banda, con Manuel Cabezalí (Havalina), Martí Perarnau (Mucho) y la base rítmica de Fuel Fandango, Carlos Sosa (batería) y Pablo Pérez (bajo), supieron modular la sonoridad desde la inmediatez de ‘David Duchovny’ hasta el oscuro rescate de ‘Camino a L. A.’, con trazos rockeros. Todo ello, con imaginería galáctica: trajes de cosmonauta y siluetas de planetas flotando sobre el escenario de Apolo (“no hay mejor nombre de sala para esta gira”, se deleitó ella).

La misma Zahara tiene varios perfiles, desde la cantautora de guitarra acústica parlanchina de ‘Adjunto foto del Café Verbena’, bromeando por haberse hecho fotos turísticas en el mismo lugar que sus padres (“¿en qué señora me he convertido?”), hasta la creadora abducida por el pop multicolor (‘Bandera blanca’, haciendo buenas migas con ‘Caída libre’). Y de ahí a la reina de la pista que, flanqueda por dos bailarines, cantó contra la maternidad subrogada en ‘Hoy la bestia cena en casa’, otro punto álgido de este ‘Astronauta’ que se coló entre los discos pop más disfrutables del 2018.