GUIONISTA ESTRELLA

Aaron Sorkin, el verbo imparable

El creador de 'El Ala Oeste de la Casa Blanca' debuta en la dirección de cine con la velozmente hablada 'Molly's game'

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zentauroepp41469321 palm springs ca january 03 screenwriter aaron sorkin ar180104175430 / LEON BENNETT / WIREIMAGE

Juan Manuel Freire

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Igual que en la escuela, al menos en los 80, nos hacían competir en pruebas de lectura fluida, en las audiciones para cualquier proyecto de Aaron Sorkin se debe premiar ante todo la capacidad para unir febrilmente unas sílabas con otras.

Incluso para actores más que curtidos, es un reto seguir la velocidad preferida por el famoso guionista, productor, dramaturgo y ahora también cineasta. Emily Mortimer, 'partenaire' de Jeff Daniels en la serie 'The newsroom', suele recordar cómo pidió a Sorkin que al menos le dejara mantener su acento británico. De lo contrario, corría el riesgo de atragantarse con palabras. 

Todavía dificulta más la hazaña que los personajes de Sorkin suelten sus diálogos de metralleta, por lo general, a paso ligero, durante planos secuencia en los que pueden entrar y salir otros personajes para decir la suya; siempre en movimiento. Es el emblemático 'walking and talking' desarrollado por Sorkin con su director de confianza Thomas Schlamme en los tiempos de 'El Ala Oeste de Casa Blanca', la serie que catapultó al primero a codiciado 'showrunner' de la tele moderna.

Oro y cobre

Pero no todas sus series han sido igual de celebradas. 'El Ala Oeste' ha sido objeto de tesis por su valor pedagógico, pero la tragicomedia televisiva 'Studio 60', exploración de los interiores de un programa cómico estilo 'Saturday Night Live', fracasó por sus ambiciones desmedidas (no iba sobre la tele, iba sobre el mundo) y por ser poco divertida cuando debía serlo.

Y luego vino la frustrante 'The newsroom', mejor cuando exploraba las intersecciones íntimas entre personajes que cuando parecía el 'manual Sorkin para arreglar el periodismo moderno'. Daniels y Mortimer eran la pareja central, pero el álter ego oculto de Sorkin era, sobre todo, John Gallagher Jr. como Jim Harper, el hombre dispuesto a dar a todo el mundo lecciones de superioridad moral.

Unas películas habladas

En 'The newsroom', Sorkin se permitía decir a los periodistas cómo hacer las cosas, trabajando además con noticias reales. Más simpática fue 'Sports night', anterior a 'El Ala Oeste', cuya redacción de canal deportivo manejaba al menos noticias ficticias. Fue su primer trabajo para tele tras los guiones de 'Algunos hombres buenos' (basada en su propia obra de teatro), 'Malicia' y 'El presidente y Miss Wade'.

El Oscar no le llegaría hasta el 2011 por el guion adaptado de 'La red social', una película clave en la cultura pop de nuestro tiempo que hasta citaron en 'Gossip girl'. ¿Cómo puede escribir una película sobre Facebook una persona confesamente poco interesada en la tecnología? Pues centrándose, sobre todo, en la parte humana y convirtiendo a Zuckerberg en una figura tipo Kane, un constructor de imperio (o aquí burbuja paralela) que paga altos costes personales por su visión.  

En 'La red social' los personajes no chatean en exceso, sino que hablan, hablan, hablan, igual que hacen Jessica Chastain e Idris Elba con aparente virtuosismo en 'Molly's game'. Sorkin parece querer recordarnos el valor de la conversación, aunque tan a menudo solo se escuche a sí mismo.