Bigas Luna, de cerca

Bigas Luna hacía cine. Y pan. Y el amor. Y quería a su familia y a sus amigos. Y comía. Y bebía. Pero, sobre todo, lo que hacía Bigas Luna era vivir. Exprimir la vida y no tomarse nada demasiado en serio. 'Bigas x Bigas' -vídeo-diario presentando en el festival de San Sebastián- rinde homenaje al cineasta catalán, fallecido en el 2013 a los 67 años víctima de un cáncer. "Le debo muchas cosas. Para empezar, una carrera y una mujer", confiesa Javier Bardem, que el día que se casó con Penélope Cruz le mandó un mensaje al director diciéndole: "Gracias por llevarnos por este camino". El Brando del Monegro y la Perla del Monegrillo se habían enamorado muchos años antes, debajo del toro de Osborne de 'Jamón, jamón'. 

Bardem -productor de la película- lo afirma en Sebastián, sentado ante un plato de jamón ibérico, pan, tomate y aceite. Muy Bigas Luna. Hay que disfrutar de la comida. El intérprete español más internacional sonríe al recordar cómo el director le dio sus primeras oportunidades en cine, dando vida al macho alfa, al español que hace las cosas "por sus cojones". 

AJOS, CERDOS Y CULOS

"En 'Jamón, jamón' me pidió que metiera ajos por el culo a un cerdo. Hasta cuatro le metí. Y como él seguía dudando de mí, le acerqué mi dedo a su nariz y al olerlo me dijo que sí, que ya no hacíamos más tomas", recuerda a carcajadas, imitando su voz. En su siguiente trabajo juntos, 'Huevos de oro', le ofreció una de las lecciones más importantes de su carrera. "Rodábamos una escena. Yo me puse muy nervioso, grité y le dije que la vida en ello. Me miró y me pidió que me relajara, que solo estábamos haciendo una película. ‘Por Dios, es cine’, me dijo. Tenía toda la razón".

'Bigas x Bigas' nace del interés de Carles Sans (Tricicle) y de la viuda del cineasta, Celia Orós, que eran conscientes de la cantidad de autograbaciones caseras realizas durante muchos años por el director de 'Yo soy la Juani'. Esas grabaciones caseras se han convertido ahora en una película. En las imágenes se ve al Bigas Luna más cercano, el más familiar, el mayor amante de los perros, el más obsesionado con el pecho femenino (grabó a Aitana Sánchez-Gijón amamantando a su bebé), el más comilón, el más tranquilo, el más divertido. 

AMANSANDO PAN

"Él está entre mis sabios de cabecera. Tenía los pies en la tierra y te decía: 'estás vivo ¿qué más quieres?' Es cierto que hay mucha gente que las pasa puta. Pero Bigas tenía ese don para contagiarte su entusiasmo por la vida”. La película, de hecho, no solo muestra las bambalinas de rodajes como 'Son de mar' sino la faceta más casera y agreste del cineasta, a los mandos de un huerto en la masía de Tarragona en la que vivía o abriendo el horno de leña para hacer hogazas de pan y disfrutarlas después con sus amigos y un buen vaso de vino.

Pionero en hacer las maletas y rodar en EEUU, ('Angustia', 1986), Bigas era "un tipo que podía ir a un polígono industrial y al festival de Cannes. Sabía estar. No conozco a nadie en el mundo del cine que hable mal de él. Ni un técnico ni un actor. Nadie. Y eso que era duro rodar con él", comenta Jordi Mollà ('Son de mar'). "Una vez me pidió tener una cara terrible de enfado y tristeza. Yo no sabía qué hacer y cogí un cinturón y me lo puse al cuello bien apretado. Me ahogaba pero la escena salió perfecta. Cuando terminamos me preguntó cómo lo había hecho", recuerda Mollà, que al igual que Bardem, imita a la perfección la voz del director.

Bardem tiene grabada a fuego la imagen del cartel de 'Huevos de oro', que precisamente compitió en San Sebastián en 1993. "Me puso delante de la cámara y me dijo que me tocara los huevos. Yo lo hice, claro. Y me miró y me dijo que ya tenía el cartel. Cuando se estrenó en Francia todos los Campos Elíseos estaban inundados de esa imagen". Fin de la entrevista. Y del plato de jamón.