Swinton y Fiennes derrochan peligrosa pasión

NANDO SALVÀ / VENECIA

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La tercera candidata al León de Oro en el Festival de cine de Venecia presentada este domingo fue abucheada, pero abucheada con estilo. A bigger splash, del italiano Luca Guadagnino, transcurre en una isla paradisiaca y por tanto es generosa en imponentes vistas; transcurre en una villa rústica de revista, habitada por cuatro personas bellas -Tilda Swinton, Matthias Schonaerts, Ralph Fiennes Dakota Johnson- que lucen sus cuerpos bronceados y tienen comidas opíparas, y cuyas vidas también incluyen un poco de sexo, de drogas y de rock'n'roll, que también suelen quedar muy bien en la foto. En otras palabras, es una película eminentemente interesada en las superficies.

REPROCHES Y SECRETOS

Por eso, no resulta extraño que la danza de reproches, secretos, deseos y pasiones que Guadagnino orquesta sirviéndose del cuarteto protagonista resulte más bien genérica y previsible.

En todo caso, A bigger splash se reivindica, o casi, gracias a la convicción de los actores -en especial un Fiennes permanentemente instalado en el histerismo y la emoción superlativa- y al bizarro modo que el director tiene de mezclar situaciones, elementos formales y estereotipos propios de géneros tan dispares como el psicodrama, el thriller y hasta la comedia de trazo grueso.