EL MISTERIO DE LOS CUADROS CONFISCADOS

El arte oculto se desvela

Las autoridades alemanas publican una primera lista con 25 de las 1.406 obras de Múnich provenientes del expolio nazi

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zentauroepp40770734 igi06 berna suiza 01 11 2017 operarios sostienen el cua171102170231 / EFE / PETER KLAUNZER

Natàlia Farré

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Como "demasiado pequeña" y "demasiado tarde" pero como "un paso al fin y al cabo hacia la dirección correcta" definió ayer la abogada especializada en arte Claudia von Selle la decisión del Gobierno alemán de empezar a publicar la lista de las obras de arte escondidas durante 50 años en un piso de Múnich por Cornelius Gurlitt y posiblemente, en su mayoría robadas o confiscadas a familias judías durante el periodo nazi. De momento, solo se han divulgado el nombre y la firma de 25 de las 1.406 piezas ocultadas, y se han hecho públicas a través de internet, en la página gubernamental Lost Art.

La decisión de publicitar las piezas -la lista se irá actualizando periódicamente- responde, según el Gobierno alemán, a la intención de aclarar y agilizar su origen lo más rápido posible. Aunque mucho han influido también las críticas recibidas por los casi dos años de silencio gubernamental. Pues la investigación empezó en el 2010 pero nada se supo de ella hasta la semana pasada.

En la lista figura una obra de Marc Chagall, dos dibujos de Otto Dix, otro de Eugène Delacroix, un grabado de Canaletto, trabajos de Auguste Rodin, Carl Spitzweg y Honoré Daumier. Además de dos piezas, un óleo de Henri Matisse y otro de Max Liebermann, cuya historia ya se conoce. El primero, 'Mujer sentada', lo confiscaron los nazis de un banco de Burdeos donde lo había depositado su dueño, el marchante judío Paul Rosenberg antes de huir a EEUU; y el segundo, 'Riders on the Beach', al coleccionista, también judío Max Liebermann.

De las 1.406 piezas encontradas en el piso de Cornelius Gurlitt -hijo del marchante Hildebrandt Gurlitt, quien colaboró con el régimen nazi vendiendo en el extranjero obras del llamado arte degenerado decomisadas a los museos alemanes-, 970 tienen un origen sospechoso, según las autoridades alemanas, que también han anunciado la creación de un grupo de seis expertos para determinar cómo llegaron las obras a manos de Gurlitt.

Incierta situación legal

Y para determinar la situación legal de las piezas en un país donde por ley no se admiten reclamaciones de víctimas del nazismo desde 1969, y en un país que en 1998 suscribió el acuerdo de Washington, acuerdo que compromete a investigar y restituir, si es el caso, las obras de arte incautadas por los nazis.