Angelina Jolie, reina del cine de acción

Hace ahora tres años, empezó a gestarse en torno a Tom Cruise una película llamadaEdwin A. Salt, sobre un agente de la CIA embarcado en una misión para demostrar que no es un espía ruso. Sin embargo, aquel personaje se parecía demasiado a Ethan Hunt, el héroe que Cruise interpreta en la sagaMisión imposible. A grandes males, grandes remedios: a cambio de 20 millones de dólares, Angelina Jolie aceptó cargarse el proyecto a la espalda, y Edwin A. Salt se convirtió en Evelyn Salt. El resultado de ese cambio de sexo llega hoy a nuestras pantallas.

Mitad intriga de espionaje y mitadactioner,Salt es ante todo un vehículo para el lucimiento de Jolie, cuyo personaje se descalza losmanolos para convertirse en una titánica fuerza de destrucción, escurridiza como una pastilla de jabón en la ducha e imparable mientras transita por un relato que resultaría trasnochado de no ser porque no hace ni dos meses que diez personas de origen ruso fueron arrestadas en Estados Unidos y acusadas de formar parte de una red de espionaje. Parece ser que Jolie quiso invitar a la más mediática de ellas, la joven Anna Chapman, a la premiere de Salt en Moscú. No pudo localizarla.

Los responsables deSalt confiesan que el guión apenas fue reescrito antes de caer en manos de Jolie, y se nota. Pese a que en un momento de la película usa su ropa interior para bloquear una cámara de seguridad, Salt aparece menos sexualizada que, por ejemplo, sus homólogos James Bond y Jason Bourne. No marca curvas, ni dispara tumbada sobre el capó de un Dodge. El póster deSaltno celebra su cuerpo, lo componen solo su cara y su nombre. La trama tampoco plantea la desventaja física que su género implica. Salt tumba a decenas de enemigos usando puños, pies y armas de fuego, salta entre vehículos en marcha en plena autopista, construye un lanzacohetes con una silla y un extintor, y todo ello con impasibilidad casi androide.

Que el papel fuera escrito para Cruise explica también que Salt carezca de vida psicológica alguna y que sus vidas privada y pública estén construidas sobre mentiras. Sin embargo, su ambigüedad moral –es a la vez feroz y frágil, guerrera y víctima, heroína y villana– la convierte en un personaje idóneo para Jolie. Porque Jolie es todo ambigüedad. Es ganadora del Oscar y estrella de blockbusters, loba robamaridos y supermamá de huérfanos, chica mala tatuada de pasado canalla y misionera de Acnur y, por supuesto, mitad de esa lucrativa marca llamadaBrangelina.

HEROÍNAS DE ACCIÓN / Lo que no admite dobles lecturas es lo bien que le sienta a su carrera el cine de acción. Sus incursiones en el drama –Un corazón invencible, El intercambio– han topado con cierta indiferencia de crítica y público, y a diferencia de otras intérpretes como Meg Ryan, Julia Roberts y Sandra Bullock, ha permanecido alejada del gueto de la comedia romántica. Pero póngala usted en el centro de una película de acción --Tomb Raider, Sr. y Sra. Smith, Wanted– y la señora de Brad Pitt se come la pantalla. Es, sin duda, la reina del cine de acción.

Es por eso que, probablemente, Evelyn Salt será pronto protagonista de su propia saga fílmica. Los más exaltados hasta la consideran pionera de una revolución para los papeles femeninos en Hollywood. Es una pena que, 31 años después de que Sigourney Weaver diera vida a la teniente Ripley enAlien,las heroínas de acción sigan siendo una anomalía.