resultados de las pruebas de competencias básicas

Ofensiva en las escuelas para que los alumnos aprendan a redactar

Alumnos del colegio público Duran i Bas de Barcelona, en las pruebas de competencias, el pasado mayo.

Alumnos del colegio público Duran i Bas de Barcelona, en las pruebas de competencias, el pasado mayo.

MARÍA JESÚS IBÁÑEZ / BARCELONA

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Un año más, y ya van siete, los estudiantes catalanes que terminan la educación primaria presentan serias lagunas en redacción. Cometen faltas de bulto en ortografía, utilizan un vocabulario pobre y, sobre todo, fallan en cuestiones de morfosintaxis (de concordancia y de estructura de la frase), de manera que a menudo sus textos apenas se entienden. Les ocurre tanto en catalán como en castellano y en inglés, según han puesto de manifiesto las pruebas de competencias básicas de sexto de primaria que realizaron, el pasado mayo, casi 75.000 jóvenes en Catalunya y cuyos resultados presentó ayer la 'consellera' de Ensenyament, Irene Rigau.

«Cuando se empezaron a efectuar estas pruebas, en el 2009, vimos que uno de los déficits más preocupantes de los estudiantes era, en ese momento, la comprensión lectora, fundamental para poder adquirir cualquier conocimiento. Ahora, el problema es la expresión escrita», observó Rigau. Por eso, agregó, «el próximo curso Ensenyament pondrá en marcha un plan de fomento de la escritura dirigido a estudiantes de primaria y de secundaria», dijo.

La expresión escrita es, de hecho, la única competencia en la que el promedio de los alumnos de sexto de primaria no alcanza una puntuación de 75, la mínima para considerar que tienen un nivel correcto. En concreto, la nota media en expresión escrita en lengua castellana es de solo 66,4 y de 67,9 en lengua catalana. En lengua inglesa se reduce a un 65,9.

LEVE DESCENSO

En líneas generales, los estudiantes que pasarán el próximo curso a primero de ESO son (solo ligeramente) algo menos hábiles que sus compañeros del año pasado. Únicamente les superan en castellano. En catalán, inglés y matemáticas sus puntuaciones son inferiores, hasta un punto y medio más baja en el caso de la lengua extranjera. Pese a ello, Rigau quiso destacar ayer los resultados de las escuelas que se sometieron a auditorías pedagógicas y que desde hace un año se encuentran siguiendo un plan de mejora específico. «En algunas materias, como en inglés, su resultado ha mejorado de forma espectacular», subrayó. La brecha entre los colegios de barrios ricos y los de barrios desfavorecidos se ha reducido, aunque en estos últimos la tasa de alumnos que no han adquirido las competencias básicas es superior al 24% en todas las materias.

Por territorios, las comarcas de Barcelona, la del Baix Llobregat y las de Tarragona se encuentran a la cola de Catalunya, especialmente en catalán y en castellano, donde no llegan a una nota de 75. Por el contrario, las comarcas de Lleida, las Terres de l'Ebre y la ciudad de Barcelona ocupan las mejores posiciones, aunque en matemáticas y eninglés comparten liderazgo con el Vallès Occidental.