El PSC pide valentía al PSOE para admitir la "singularidad" catalana

Nuevo toque de atención de los socialistas catalanes a sus correligionarios del PSOE. El líder del PSC en las comarcas de Girona, Juli Fernández, reclamó este jueves al partido que lidera Pedro Sánchez que reconozca la singularidad catalana. "No hacer este reconocimiento sería una muestra de debilidad política del PSOE", advirtió, en unas declaraciones en las que admitió la existencia de un "malestar importante" por los últimos gestos del socialismo español en relación al modelo de Estado.

Fernández lamentó que el PSOE haya dado un "paso atrás" y le hayan "temblado las piernas" a la hora de reconocer la singularidad catalana en cuestiones como la lengua, la cultura y el modelo de financiación. Esta semana el PSOE admitió, pese a haber abierto la puerta a un sistema fiscalsistema fiscal específico para Catalunya, que no se plantea esta posibilidad en el marco de la propuesta de reforma de la Constitución.

Por ello, el dirigente del PSC lamentó "que exista gente del PSOE que ponga en duda la singularidad de nuestro país". Fernández aseguró que esta especificidad es "irrenunciable" para su partido.

LA FINANCIACIÓN

Las palabras del dirigente gerundense llegan tras la puerta que cerró contundentemente el PSOE a un trato específico para Catalunya en materia de financiación, como habían sugerido dirigentes del propio partido. La propuesta de reforma constitucional socialista no incluirá, pues, esta especificidad.

Por otra parte, el PSC estudia la posibilidad de vender su emblemática sede central en la calle de Nicaragua de Barcelona. El partido no ofrece más información al respecto, más allá de confirmar que sí está en trámite la posibilidad de vender otra sede, la de la calle de Pau Claris de la capital catalana. La noticia sobre la venta del edificio de Nicaragua llega pocos meses después de que también CDC anunciara su intención de vender su cuartel general, en la calle de Còrsega de Barcelona.

La decisión del PSC responde a las estrecheces presupuestarias de la fuerza tras un ciclo de reveses electorales que han comportado la rebaja en los ingresos por subvenciones públicas. La sede central del partido ha sido el epicentro de las noches electorales del PSC. Allí se ha vivido desde la celebración en la calle de resultados como el que permitió a Pasqual Maragall acceder a la presidencia de la Generalitat, hasta las derrotas electorales en las locales, autonómicas y generales con escasa presencia de militantes.