El PSC ultima un pacto de gobierno con el PP y Unió en Tarragona

El PSC pronto dejará de gobernar en minoría en el Ayuntamiento de Tarragona gracias a un pacto, cocinado desde Navidad, con el PP y Unió. La oposición ya ha cargado este lunes contra esa alianza. El alcalde Josep Fèlix Ballesteros ha informado este lunes a la ejecutiva local del PSC, una agrupación que se ha tensionado en las últimas horas por los reproches por pactar "con la derecha más rancia", expresados públicamente por la corriente más progresista, representada por el exconcejal y diputado en el Parlament Carles Castillo o el líder de las juventudes, Alejandro Caballero. Sin embargo, la reunión no era vinculante y tampoco se preveía un rechazo feroz al pacto.

El frente abierto es la militancia, que advierte incluso de bajas del partido. El próximo viernes está convocada una asamblea local y una corriente quiere someter el pacto a votación, siguiendo la estela del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, en los posibles pactos para el Ejecutivo central.

El PSC gobierna en minoría con 9 de los 27 concejales y el pacto le daría mayoría absoluta, con los cuatro concejales del PP y el único concejal democristiano, Josep Maria Prats. Se da el caso de que Prats se ha escindido del grupo de CiU al rechazar el independentismo y ha creado grupo propio bajo las siglas de UDC. El grupo de CiU estudia llevarlo a los tribunales.

Ballesteros, en su conferencia anual de la ciudad celebrada el jueves, ya abogó por una "mayoría estable" para ejercer la "capitalidad " del territorio.

GUIÑOS DE LOS POPULARES

Los guiños de los populares hacia el gobierno evidenciaban lo avanzado de las negociaciones. De una beligerancia exacerbada hacia Ballesteros, los populares apenas han valorado que esté imputado por el 'caso Inipro', en el que el juez investiga contratos irregulares que ascienden a 245.000 euros de empresas vinculadas al PSC para prestar atención a los inmigrantes. Se han limitado a expresar su respeto por la justicia, un oasis en el clamor en bloque de la oposición (C's, ERC, CiU, CUP, ICV) por el papel del alcalde en este supuesto caso de corrupción. También permitieron que se aprobaran los presupuestos municipales.

Tan avanzadas están las negociaciones que, según avanza este lunes el 'Diari de Tarragona', ya están repartidas las carteras. El PP ostentaría Turismo, Vía Pública y Deportes, en un momento máximo de protagonismo de esta concejalía por los Juegos del Mediterráneo Tarragona 2017.

El portavoz Alejandro Fernández también será primer teniente de alcalde y presidente de las empresas municipales de Aparcamientos y la Funeraria y Prats se quedaría con Cultura, si bien el Psc conservará Patrimonio.

Esta tarde, Prats también expondrá los detalles del pacto a la ejecutiva local y en el PP, lo validará la ejecutiva autonómica.

Tarragona será así la segunda capital de provincia gobernada con una coalición del PSC con la derecha. En el caso de Lleida, Àngel Ros pactó con Ciutadans. Ambos alcaldes mantienen una buena relación personal, que pivota sobre sus fuertes creencias religiosas.