ELECCIONES 24-M

Sánchez equipara PP y corrupción y pide «limpieza» en Valencia

Vista de la plaza de toros de Valencia durante el acto electoral del PSOE, ayer.

Vista de la plaza de toros de Valencia durante el acto electoral del PSOE, ayer.

JUAN RUIZ SIERRA / VALENCIA

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En su primer mitin de grandes dimensiones desde que alcanzó el liderazgo del PSOE, en la plaza de toros de Valencia, ante cerca de 15.000 personas, Pedro Sánchez ha arremetido este sábado contra los escándalos de corrupción que asedian al PP. Si hay una autonomía que ejemplifica el dominio conservador, y también los supuestos platos sucios de los partidos, es la Comunitat Valenciana, que los socialistas esperan reconquistar el próximo domingo gracias a un pacto con el resto de los partidos de izquierda (Compromís, Podemos e IU) que les permita desterrar a unos conservadores que llevan décadas ocupando el poder.

Las críticas a la corrupción fueron constantes durante el mitin. El secretario general ha pedido el voto «para hacer una política limpia» y «liberar al país de la correa de la 'Gürtel'». También ha apelado, en su constante mensaje al voto útil, a la «mayoría social» que «no se resigna» ante el PP. El candidato socialista a la Generalitat valenciana, Ximo Puig, por su parte, ha subrayado que una cosa eran los valencianos y otra, muy distinta, los dirigentes del PP.

LOS ACUERDOS

La Comunitat Valenciana, junto a la de Madrid, es la principal meta que tiene el PSOE ante las elecciones del próximo domingo. La autonomía ejemplifica el dominio del PP desde hace décadas, y sobre todo la corrupción asociada a los conservadores. Pero el PSOE no lo tiene fácil. La segunda posición en los comicios parece casi asegurada, según las encuestas, pero a cierta diferencia del partido de Mariano Rajoy. La única posibilidad, no excesivamente cercana, pasaría en principio por un acuerdo de los socialistas con Compromís, Podemos, IU y quizá Ciudadanos, que hasta ahora ha jugado a la equidistancia entre los dos partidos mayoritarios.

«Estamos llamados a construir una Valencia con honra», ha señalado Sánchez, que ha abogado por un «destino de justicia» y «limpio». Ante la reaparición en esta campaña del expresidente del Gobierno José María Aznar, el líder socialista ha dicho: «La regeneración del PP es esconder a Rajoy, el amigo de [Luis] Bárcenas, y sacar a Aznar, que es el gran amigo de [Rodrigo] Rato y de [Miguel] Blesa».

«Los valencianos somos honrados. Quienes no lo han sido son los dirigentes del PP. Pero nada tienen que ver con los valencianos», ha argumentado Puig justo antes de detenerse en la próxima visita a esta ciudad, también en la plaza de toros, de Rajoy. El candidato socialista ha recordado que con el líder del PP no estarán algunos de los grandes personajes históricos de su partido en esta autonomía, implicados en escándalos, presuntos y no, de corrupción: desde el expresidente de la Generalitat Francisco Camps, hasta el expresidente de la Diputación de Castellón Carlos Fabraactualmente en prisión, pasando por el alcalde de Xàtiva, Alfonso Rus, que aparece en una grabación contando billetes, supuestamente de una comisión ilegal.

«Cuando venga Rajoy, le faltarán algunos amiguitos del alma. No estará Camps, no estará Rus, no dejarán a Fabra salir de la cárcel -ha concluido Puig-. Se acabó, quedan ocho días para pasar página, para que ningún valenciano tenga que agachar la cabeza cuando hablen de su tierra».