El órdago soberanista

El Gobierno inicia los contactos para reformar la financiación

El ministro Cristóbal Montoro conversa con el 'conseller' Andreu Mas-Colell, en el CPFF del pasado diciembre.

El ministro Cristóbal Montoro conversa con el 'conseller' Andreu Mas-Colell, en el CPFF del pasado diciembre.

GEMMA ROBLES / NEUS TOMÀS / Madrid / Barcelona

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Según el orden del día que se ha remitido desde el Ministerio de Hacienda a las distintas comunidades autónomas, la de hoy será una reunión preliminar y muy técnica, pero servirá de punto de partida a la negociación del Gobierno con las autonomías para modificar el sistema de financiación vigente. Se celebrará en Madrid, en el ministerio, puesto que el grupo de trabajo que se va a constituir formalmente al efecto nace como consecuencia de un acuerdo adoptado en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). La idea es aprovechar esta primera cita, que presidirá la secretaria general de coordinación autonómica y local, Rosana Navarro, como «toma de contacto» para establecer las reglas y los plazos de una negociación entre administraciones. En paralelo a la búsqueda de acuerdos políticos (que no serán fáciles de alcanzar, a tenor de las posiciones de partida que se van adelantando), un grupo de expertos designado hace meses por el Consejo de Ministros está elaborando una propuesta de reforma del modelo de financiación -además de otra fiscal- que, en su totalidad o en parte, el Ejecutivo central prevé adoptar como propia.

Abiertas ya estas dos vías de trabajo, las comunidades empiezan a marcar el terreno. En lo que concierne a Catalunya, desde la Generalitat se apunta que estarán representados en la reunión de hoy para dejar constancia de su voluntad de asistir a todos aquellos foros en los que adopten decisiones que puedan afectar a la comunidad.

EL ARCO MEDITERRÁNEO / «Catalunya estará en el debate pero no lo liderará», resumen fuentes del Ejecutivo catalán. Su propósito es constatar hasta qué punto el Ministerio de Hacienda es consciente de los perjuicios que el actual sistema provoca, a su juicio, en las comunidades del arco Mediterráneo o Madrid. «Se trata de ver por dónde va a ir esta negociación», añaden las citadas fuentes.

Precisamente, el presidente madrileño, Ignacio González, avisó ayer de que peleará por un sistema solidario y equitativo, lo que a su entender se traduce en que «en ningún caso» Madrid puede recibir «una financiación por habitante menor que la media del resto de ciudadanos españoles». «Queremos un sistema transparente, que reconozca al cien por cien de la población real, que no quede ningún madrileño sin reconocer, como pasa ahora, a efectos de financiación de los servicios, y que recibamos la misma financiación que el resto recibe por habitante», indicó González.

MÁS CAPACIDAD FISCAL / El lunes, en una entrevista en televisión, Mariano Rajoy dijo que la reforma del sistema de financiación es, junto a la del modelo fiscal, una de las más importantes medidas de cuantas su Gobierno piensa impulsar este año. Y sin duda alguna será también candidata a levantar agrias polémicas entre autonomías, incluso aunque estén gobernadas por su partido.

Madrid lleva tiempo avisando de que está dispuesta a apretar las tuercas al Ejecutivo central para conseguir más dinero y, como Extremadura, ha lanzado varios mensajes de advertencia para que no se use la negociación sobre la financiación autonómica para tratar de «frenar» el proceso soberanista catalán a golpe de talonario. También Valencia y su presidente, Alberto Fabra, exigen que se tenga en cuenta su situación y su falta de recursos a la hora de diseñar un nuevo sistema que, en opinión de Fabra, debería tener carácter retroactivo respecto a su entrada en vigor, aunque no sea aprobado hasta dentro de unos meses.

Pero fuentes gubernamentales advierten de que se equivocan los que crean que la esencia del modelo será inyectar liquidez: el plan de Cristóbal Montoro pasa por dar más capacidad fiscal a las autonomías con la reforma de impuestos para complementar la financiación.