El fiscal implica a Nadal en una supuesta estafa urbanística

La Fiscalía Anticorrupción ha implicado al dirigente histórico del PSC y exconseller de Política Territorial durante el gobierno tripartito, Joaquim Nadal, en una presunta estafa millonaria a una promotora inmobiliaria a raíz de una operación urbanística en Santa Cristina d'Aro (Baix Empordà). La acusación pública sostiene en un escrito remitido en junio al juzgado de Barcelona que investiga los hechos que Nadal, que ya ha declarado ante la Guardia Civil, promovió «las negociaciones pertinentes»» para firmar uno de los convenios investigados y que permitió un intercambio de terrenos para uso industrial. La fiscalía sopesa citar al exalto cargo como imputado.

La supuesta intervención de Nadal se produjo en el convenio firmado el 11 de octubre del 2006 entre el  Ayuntamiento de Santa Cristina

d' Aro, el Incasol y la promotora Varal Real Estate. En virtud de dicho convenio, la empresa vendió el 50% de una finca ubicada en la zona de  Molí d'en Reixac al Institut Català del Sol (Incasol) por siete millones de euros, renunciando al desarrollo industrial de la zona y adquiriendo importantes derechos urbanísticos en una finca sita en otro lugar del municipio, en la zona de Bernades.

EL ENGAÑO / El fiscal Fernando Maldonado detalla que «este convenio es otro de los pilares fundamentales para mantener la posible existencia de un delito de estafa cometido por los representantes institucionales del Ayuntamiento de Santa Cristina y el Incasol». Y es que en dicho convenio no se informa a la promotora que los terrenos de Bernades son inundables y, por lo tanto, no se puede construir en ellos. La inundabilidad de esta zona fue determinante para que el Incasol renunciara en el 2010 a reparcelar los terrenos.

El fiscal alega que si tanto el entonces alcalde de Santa Cristina, Ricardo Herrero, como Nadal sabían  que los terrenos proporcionados eran inundables y lo «habían ocultado» a la promotora, podrían haber cometido un delito de estafa, por cuanto habrían engañado a la empresa para que esta vendiese la finca de Molí d'en Reixac, renunciando a sus derechos allí  a cambio de desarrollar un proyecto industrial en la zona de Bernades, que era  «imposible de ejecutar». Hay varios testigos y documentos que avalan que esos terrenos eran inundables.

La acusación pública apunta a que detrás de esta operación no está la preservación de la Vall de Solius, como alegan los implicados, sino la adquisición en marzo del 2006 por parte de una sociedad de la familia del editor José Manuel Lara de la finca Can Dalmau, próxima a esa zona. El Ayuntamiento de Santa Cristina cambió incluso de criterio y modificó el uso industrial de los terrenos y los mantuvo como de valor paisajístico y zona verde. Nadal evitó ayer pronunciarse sobre el tema.