La lacra de la corrupción

Cotino niega contratos por la visita del Papa

El presidente de las Cortes Valencianas ampliará su querella contra la policía

Juan Cotino, en las Corts Valencianes.

Juan Cotino, en las Corts Valencianes.

LAURA L. DAVID
VALENCIA

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El presidente de las Corts Valencianes, Juan Cotino, ha negado haber participado en las adjudicaciones a la trama Gürtel en la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia en el 2006, tal y como aseguran varios de los testigos que han declarado en la pieza 4 del caso que instruye el Tribunal Superior de Justicia valenciano y como señala el último informe conocido de la Unidad de Delitos Económicos y Financieros (UDEF) de la Policía.

Cotino compareció ayer para replicar la investigación de una de las seis piezas de la rama del caso Gürtel que el juez José Ceres instruye en Valencia y en la que se vincula al ex consejero de Francisco Camps con la organización del V Encuentro Mundial de las Familias. Además de varios testimonios de la Generalitat y de la radiotelevisión valenciana, que retransmitió el evento, que reportó a la red corrupta más de 7,4 millones de euros, un informe policial sitúa a Cotino como «elemento nuclear» en las decisiones sobre las contrataciones públicas.

El presidente de las Cortes dijo ayer que las acusaciones son «falsas» y anunció que ampliará la querella que ya interpuso a principios del 2014 contra el agente de la policía que elaboró el informe, un cuerpo del que el ahora investigado llegó a ser director general en el Gobierno de José María Aznar. Cotino acusó al agente de hacer «un refrito» de lo que le conviene y de interpretar, «de buena o mala fe», en lugar de investigar.

El presidente de las Cortes -que admitió sentirse «fastidiado» por la información publicada sobre la investigación judicial- defendió que no tuvo «absolutamente nada que ver con el contrato de Canal 9 y con la Fundación del V Encuentro».

«No firmé, ni lo pensé», insistió Cotino, que siempre ha defendido que participó en la visita como «voluntario» y que se le comunicó «cuando ya estaba hecho» el contrato con RTVV para la instalación de pantallas gigantes con la constructora Teconsa perteneciente a la trama Gürtel.