No me pienso pesar nunca más

Me gustan los artículos periodísticos que tratan de temas curiosos o inesperados. Como el que ha publicado en EL PERIÓDICO Imma Sust. 'Mujer contra mujer. Gordofobia'. Es decir, odio a la grasa. En algún momento de nuestra vida es seguro que nos encontraremos con alguna persona que nos dirá: "veo que te has engordado". Más raramente nos advertirán que hemos adelgazado. Porque, en principio, engordar es considerado más peligroso para la salud.

Hablo en general, claro. Por otra parte, y favorecidos por la suerte, podemos ganar dinero con el Gordo de Navidad. La 'Flaca' de Navidad daría risa. Refiriéndose al cuerpo humano, hay expresiones diferentes en catalán y en castellano. "Flaco, de pocas carnes, delgaducho...". En catalán es frecuente el 'primet', que es un discreto diminutivo. Pero si se quiere exagerar hay una palabra que me parece muy pintoresca: 'escarransit', enclenque en castellano.

Es interesante tener presentes algunos apellidos habituales. además del famoso general Prim ha aparecido el político Delgado, y no faltan los adjetivos hermanos. He conocido al señor Gordo y el señor Gras, que es mi farmacéutico, y su báscula es la que dice que no engordo, al contrario, más bien adelgazo.

¿Qué influencia tiene la alimentación en el peso? Pienso que no se debe generalizar. Hay gente que engorda aunque coma lo que definimos como una miseria y hay auténticos devoradores de toda la vida que nunca han echado barriga. Misterios del cuerpo humano. Durante los años tempranos del cine fueron extraordinariamente populares dos personajes: Stan Laurel y Oliver Hardy, que se hicieron famosos como el Gordo y el Flaco. Si no recuerdo mal, el gordo era el listo y el delgado hacía el papel de tocho o de bobo.

Ahora me he pesado y he visto que estoy entre los 64 y los 65 kilos. Años atrás pesaba tres o cuatro más. ¿Es posible que la báscula me diga que la inteligencia se me está rebajando? No pienso pesarme más.