Miquel Reina: "Mi libro subió a número uno en Amazon, sin buscarlo"

Miquel Reina (Sant Sadurní d'Anoia, 1986) era un creativo publicitario de la agencia Grey de Barcelona. Le iba bien –y eso que la crisis iba al galope–, pero sentía que estaba estancado. Hace un año y medio consiguió un empleo en Thinkingbox, un estudio de Vancouver, en la costa pacífica de Canadá, que trabaja para Paramount, Sony y Warner. Lo más.

Sin embargo, tenía una historia metida en la cabeza. Robó horas al sueño para escribirla, la tituló 'Luces en el mar' y, sin padrino alguno, la chutó al ciberespacio. Lo que ocurrió fue un milagro. De momento quédense con este dato: la tirada media de un libro en España es de 3.496 ejemplares por título.

¿Tantas ganas tenía de escribir? Soy un motivado. Y lo que más me gusta es explicar historias. El origen de 'Luces en el mar' se remonta al 2008, cuando estaba terminando la carrera en Elisava. Tenía que escribir un guion para una asignatura y no había forma de dar con una idea.

Qué apuro. Ahí estaba yo, en el salón de mis padres, mirando una casa de muñecas de color amarillo situada en equilibrio precario sobre un mueble y pensé: "En cualquier momento, alguien pasará y la hará caer".

¿La casa que flota en el mar de su libro? La misma. Descarté la idea para la asignatura, pero se fue expandiendo en mi cabeza. Imaginé personajes y tramas. Hice un borrador, se lo di a leer a mi madre y me animó mucho. Solo cuando me instalé en Vancouver pensé en sacarla a la luz.

¿Conocía a alguien de la industria editorial? A nadie. Leo mucho en el libro electrónico y un día vi que Amazon convocaba un concurso para autores independientes. "Con la cantidad de títulos que mueven, nadie me leerá", pensé. Pero, pese a que suelo dudar mucho de todo, me creé un perfil y el 31 de septiembre del 2016 subí el libro en formato Word. 

¿Y? En 48 horas se produjeron 6.000 descargas, y la puntuación rondaba el 4,6 sobre 5. ¡Toda esa gente no me conocía de nada y ya me había leído! Pero aún flipé más cuando vi que empezaban a buscarme a través de las redes sociales y me mandaban mensajes privados. Sin buscarlo, el libro subió al número uno en varias categorías, entre ellas la de novela de viajes.

¿Compró lectores o algo así? El sistema de Amazon es extremadamente democrático. Los libros suben o bajan en el ránking en función de la puntuación de los lectores. Pero es que hace ocho meses volvió a ocurrir algo sorprendente. 

¿Más aún? Recibí a través de Linkedin una petición de contacto de la agente Mónica Carmona. Me dijo que había visto el fenómeno de Amazon y que quería leer el libro. Acepté que me representara y al cabo de una semana ya tenía cinco ofertas de editoriales españolas –Espasa lo publica el próximo martes–, ha conseguido contratos en Alemania e Italia y –¡brutal!– ha vendido los derechos en inglés para Amazon.

Desanda el circuito habitual. Sí, voy de lo digital al papel. Y el papel me gusta.

Ha tocado techo. Ya no se puede hacer más. Se puede hacer una película... Mis colegas del estudio quieren llevar el libro a Los Ángeles.

¡Por los hermanos Lumière! Y hasta tendrá un cásting en mente... Mientras escribía, la cara de mi protagonista era la de Meryl Streep.

Los protagonistas son pareja. ¿A quién ve para él? A una mezcla de Ed Harris y Tom Hanks. 

Mire que si se hace realidad... De toda esta experiencia he sacado en claro una cosa: todo es posible, pero hay que currárselo mucho.