En memoria de Blume

Los mejores gimnastas evolucionarán en el Vall d'Hebron en un nuevo torneo dedicado al gran 'Achim'

El español Ray Miguel Zapata, en el caballo con arcos.

El español Ray Miguel Zapata, en el caballo con arcos. / periodico

JOAN CARLES ARMENGOL / BARCELONA

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Joaquim Blume fue un rara avis, un adelantado en el deporte español y catalán. Una figura en tiempos grises que, con su perfecto Cristo en las anillas, dio brillo a la gimnasia. Campeón de Europa en el concurso completo en 1957, se aprestaba a dar la gran campanada en los Juegos Olímpicos de 1960 (Roma) cuando, un año antes, un accidente de aviación se lo llevó para siempre. Se fue el gimnasta, pero su mito se acrecentó con el tiempo y su leyenda sigue viva. Muy viva, como su memoria, que cada dos años se refresca con la celebración del torneo que lleva su nombre. El Memorial Blume llega hoy a su 37ª edición con perfecta salud y buen estado de revista, una vez que la capital recuperó la competición en el 2010, y que ahora se alterna anualmente con el Ciutat de Barcelona de gimnasia rítmica.

El pabellón olímpico del Vall d'Hebron se ha vestido con todos los aparatos para la ocasión, y la tarde del sábado, de 17.00 a 20.30 horas, se apresta a recibir a 24 gimnastas de 14 países que no solo honrarán al legendario Achim sino que ejecutarán esos ejercicios que tan imposibles nos parecen al resto de mortales. El ambiente impregnado de magnesio, colchonetas y barras paralelas ya llenaba el viernes un pabellón que está previsto que se abarrote con más de 2.000 espectadores. La entradas volaron y solo 200 estarán dispuestas en taquilla para el último momento. Barcelona, que presume de capital del deporte, no consigue disponer de un pabellón intermedio, entre el inmenso Palau Sant Jordi y el coqueto Vall d'Hebron, para este tipo de competiciones.

De los 16 a los 39 años

El Memorial Blume acogerá a campeones olímpicos, mundiales y españoles, con una oferta muy atractiva que va desde los 16 años de la vallesana Laura Gamell, mundialista ya este año en Nanning (China), y los 39 de la uzbeca nacionalizada alemana Oksana Chusovitina, una gimnasta inmortal, esposa y madre, que perseguirá en Río sus sextos Juegos Olímpicos. Chusovitina ya ganó, en Barcelona-92, el oro con el equipo unificado de la exUnión Soviética, y tiene el récord de medallas individuales ganadas en Mundiales en un mismo aparato (9, en salto).

En hombres, ojo al ucraniano Oleg Verniaiev, cuarto en el último Mundial y ganador del Blume 2012, y al brasileño Sergio Sasaki (7º en el Mundial), el bielorruso Andrei Lijovitski (14º) , el suizo Oliver Hegi (18º) y el catalán de Ripollet Rubén López (9º por equipos en Londres 2012). El Memorial se acordará también de Andreu Vivó, fallecido en el 2012 a los 34 años, un grande que, como Blume, nos dejó demasiado pronto.