David Bustamante, la voz ligera

David Bustamante sale a escena valiéndose de su voz agradable, heredera de los amables ‘crooners’ mediterráneos, con sus aires de tipo sencillo y de emotividad fácil, y todo en él es ligero: su entonación, su figura, sus canciones y su banda. Bustamante, galán de mediodía, suave y perfumado, tan ajeno a la trascendencia como a los males de la afectación, acelerando respiraciones a su paso, este sábado, por el Auditori del Fòrum.

Notable griterío en el patio de butacas cuando irrumpió al son de ‘Total’, la canción que abre su nuevo disco, ‘Amor de los dos’. Aquellas autodenominadas ‘bustalibanas’ de hace unos años se han amansado un poco, pero no mucho. La platea, salpicada por globos rojos en forma de corazón, y ‘Busta’, tan cercano y tan majo, pero poniéndose chulo en la letra de la canción. “Total, si no tengo tus besos / no me muero por eso / Ya yo estoy cansado / de tanto besar”.

BANDA ESQUEMÁTICA

Está bien que el cantante cántabro (de “Sant Vicenç de la Barquera”, bromeó), haya moldeado ese personaje accesible, sencillo, poco tentado por estéticas pretenciosas, pero lleva esa idea demasiado lejos en las instrumentaciones: banda esquemática, de sintetizador y guitarra con impulsos ‘heavy’, inapropiada para defender los boleros clásicos de ese ‘Amor de los dos’. Se entiende que las orquestaciones del disco no fueran trasladables a la gira, pero el salto de registro es demasiado brusco.

Pero, en fin, Bustamante moduló su voz con aplomo en ‘Historia de un amor’ y un ‘Bésame mucho’ en clave ‘up-tempo’, y se creció en el vals ranchero de ‘Cielo rojo’ alargando la nota en el compás final. Escenas de empatía con la afición. “Son muchos años, aquí empezó todo”, apuntó evocando los inicios de ‘O. T.’, e invitando al público a interpretarle a través de esas estrofas. “A que conozcan un poco de mi vida”.

CONTACTO DIRECTO

El nuevo-viejo repertorio quedó luego a un lado para, incomprensible interludio instrumental mediante, proceder al repaso de éxitos propios. Bustamante ha depurado el repertorio y evita su material más lejano. Pop melódico sutilmente arrebatado, como en ‘Cobarde’, que cantó correteando por las primeras filas buscando el contacto directo. Ahí pidió disculpas a sus fans si en alguna ocasión no ha estado a la altura.  “Siempre intento desvivirme. Si he fallado alguna vez, que me perdone como ser humano”.

Y así, desde su humana condición, el Bustamante más genuino en el melodrama de ‘Miente’, un ‘Hoy tengo ganas de ti’, de Miguel Gallardo, cuyo clímax cantó sin micro, y una única canción de los viejos tiempos, ‘Dos hombres y un destino’. Pieza que cantaba en ‘O. T.’ con Àlex Casademunt, hace un millón de años.