PROCESO JUDICIAL TRAS UN ASESINATO POLÍTICO EN RUSIA

Un tribunal de Moscú considera culpables a los cinco acusados por el asesinato del opositor Nemtsov pero no identifica al cerebro

El jurado considera probado que los cinco convictos chechenos ejecutaron el homicidio, al pie de las murallas del Kremlin, o contribuyeron en los preparativos

Flores en memoria de Nemtsov en el lugar donde se produjo el asesinato, en Moscú.

Flores en memoria de Nemtsov en el lugar donde se produjo el asesinato, en Moscú. / AP/gs

MARC MARGINEDAS / MOSCÚ

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

De acuerdo con la justicia rusa, el asesinato, hace dos años, de Borís Nemtsov, la más prominente figura de la oposición local, al pie de las murallas del Kremlin, tiene brazos ejecutores y cómplices, pero carece de móvil y 'cerebro'.  Un tribunal militar de Moscú ha declarado culpables a los cinco acusados por el asesinato, todos ellos orginarios de Chechenia y la vecina república de Ingushetia.

Pero durante la vista judicial no se ha aclarado ni las razones por las que fue asesinado, ni ha castigado a la persona o personas que encargaron el crimen, una conclusión muy parecida con la que acabó el juicio por el asesinato de la periodista Anna Politkóvskaya.

El jurado considera probado que Zaúr Dadayev fue el autor material de los disparos, mientras que los otros cuatro encausados -Chadid y Anzor DubayevTemirlán Eskerjánov, y Jamzat Bajaiev- participaron en el homicidio o contribuyeron en sus preparativos, conduciendo el vehículo que fue empleados en la noche del 27 de febrero del 2015 o siguiendo durante días a la víctima para conocer sus movimientos. Nada más ser arrestado y trasladado a Moscú, Dadáyev admitió su culpabilidad ante el juez, aunque luego se retractó de sus palabras y aseguró haber confesado bajo tortura.

Algunos encausados son chechenos vinculados con el Gobierno y las fuerzas del orden en la república caucásica, presidida por Ramzán Kadírov, un aliado muy próximo del presidente Vladímir Putin. El jurado ha identificado a una de las personas que encargaron el crimen -Ruslán Mujudínov, un conductor adscrito al Ministerio del Interior en Chechenia, quien prometió a los condenados 15 millones de rublos (unos 220.000 euros al cambio actual)- y admite que otras personas "desconocidas"  han jugado el papel de organizadores. Mujudínov se encuentra en paradero desconocido.

SEGÚN LA FAMILIA, LA INVESTIGACIÓN ES UN "FIASCO TOTAL"

La familia de Nemtsov ha hecho una valoración muy crítica del desarrollo de las investigaciones, cuya dirección asumió personalmente el presidente Vladímir Putin en los días posteriores al asesinato, y del propio juicio. Ya antes de comenzar la vista judicial, hubo problemas para reclutar a los miembros del jurado, lo que fue atribuído al temor de los posibles integrantes de verse involucrados en un asesinato de tanta envergadura. El veredicto se ha retrasado más de lo esperado ante la dificultad de los jurados de ponerse de acuerdo, lo que es atribuído por la oposición rusa a las "presiones recibidas".

 Vadim Prójorov, abogado de la familia, considera que la investigación ha sido un "fiasco total". "Es el principal crimen del siglo, y no han identificado ni a los organizadores, ni a aquellos que lo ordenaron", ha valorado el letrado. "El Gobierno ruso no quería investigar en el entorno del líder checheno, Ramzán Kadírov", ha continuado.

En una declaración difundida en Facebook, Zhanna Nemtsova, la hija del asesinado, se ha preguntado porqué personas muy próximas a Kadírov, como Ruslán Gereméyev, comandante del batallón Sever, cuya participación se considera probada por la investigación, "ni siquiera se encuentra en busca y captura". "Seguiremos luchando para que se separ toda la verdad con todos los medios posibles", concluye Nemtsova. 

El Kremlin, por su parte, se ha eximido de la responsabilidad de continuar las pesquisas dadas las lagunas que existen en el veredicto y ha derivado la decisión en los investigadores. "Es decisión de los investigadores", ha declarado Dmitri Peskov, portavoz de la presidencia.