GESTO PROVOCADOR

La Fuerza Aérea Británica intercepta dos bombarderos rusos cerca de Inglaterra

El ministro de Defensa británico advierte del peligro desestabilizador de Putin en los estados bálticos

Bombardero ruso Tu-95 'Bear'.

Bombardero ruso Tu-95 'Bear'. / RAF

BEGOÑA ARCE / LONDRES

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El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha vuelto a hacer un gesto provocador al Reino Unido, en un ambiente de creciente tensión entre ambos gobiernos. Dos bombarderos rusos fueron escoltados este miércoles por varios aviones Tyhoon de la Real Fuerza Aérea Británica (RAF), cuando se hallaban volando en las proximidades de las costas de Cornualles, al oeste de Inglaterra.

De acuerdo con el comunicado oficial emitido por el Ministerio de Defensa británico, los dos Tu-95 'Bears' rusos en ningún momento llegaron a penetrar el espació aéreo de soberanía británica. Si bien, como explica la nota oficial, “en ningún momento se consideró que los aviones rusos representaran una amenaza”, la excesiva proximidad de los aparatos provocó la operación de acción rápida.

El incidente ocurrió el mismo día en el que el ministro británico de Defensa, Michael Fallon, aseguró que Putin es “un peligro real e inminente” para los estados bálticos de Letonia, Lituania y Estonia y que la OTAN debe estar preparada para una agresión. Los rusos “están modernizando sus fuerzas convencionales, modernizando sus fuerzas nucleares y están poniendo a prueba a la OTAN, por lo que necesitamos responder”, afirmó Fallon.

INCURSIONES EN AUMENTO

La presencia de aviones rusos cerca del espacio aéreo británico no es algo nuevo. El pasado 28 de enero otros dos 'Bears' fueron interceptados cerca de las costas del canal de la Mancha. De acuerdo con fuentes de la OTAN, las incursiones de aeronaves rusas han aumentado a medida que ha ido creciendo la tensión con Moscú a causa de la crisis de Ucrania.

El Ministerio de Exteriores británico convocó al embajador de Rusia para exigir explicaciones sobre el incidente, que provocó perturbaciones en vuelos de aviación civil, aunque tampoco entonces hubo violación del espacio aéreo británico.

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