Maduro ordena retirar de circulación los billetes de 100 bolívares, los más usados

La decisión tiene toda su carga simbólica. El billete de 100 bolívares con el rostro del padre de la patria, corroído por la inflación hasta reducir su capacidad de compra a la nada, pasará en 72 horas a la historia venezolana del descalabro económico. El presidente Nicolás Maduro ordenó su salida de circulación. La medida, en principio, tiene un múltiple objetivo: de un lado, detener la escalada del dólar, que impone su lógica en el mercado negro. Maduro dijo que además asesta un golpe a bancos privados “desestabilizadores” y a las mafias que operan en la frontera con Colombia que cruzan multitudes para aprovisionarse.

En los hechos, esos grupos de legalidad consentida vienen administrando la liquidez del papel moneda. Aunque su valor es nimio, el billete de 100 bolívares representa casi el 50% del circulante: hay en la calle más de 6.000 millones de piezas. Por eso, los venezolanos se acostumbraron a llevarlos por “cantidad”, en bolsas o paquetes, a la hora de alguna adquisición que exceda el menudeo. Sus dueños podrán depositar los billetes de 100 hasta el jueves. Cuando se cumpla “el plazo prudente”, podrán canjearlos en las oficinas del Banco Central durante 10 días.

“Vamos a cerrar todas las posibilidades terrestres y marítimas para que no regresen esos billetes de 100 bolívares que se llevaron”, anunció Maduro el domingo por la noche. La medida ha sido interpretada como un cierre fronterizo.

El pasado 7 de diciembre, el Banco Central presentó en sociedad la nueva “familia” monetaria. En adelante, el papel moneda tendrá las denominaciones de 500, 1.000, 2.000, 5.000, 10.000 y 20.000 bolívares para ponerse más a tono con el coste de la vida. El billete de 100 había entrado en circulación en enero del 2008, en el marco de la “reconversión” dispuesta por Hugo Chávez. Entonces, se le quitaron tres ceros a la moneda.

CONFIANZA EN LA MONEDA NACIONAL

Chávez  dijo entonces que se buscaba “consolidar la confianza en la moneda nacional” y producir “efectos psicológicos positivos en las expectativas de las personas”. La publicidad habló de un “Bolívar fuerte”. Solo hasta diciembre del 2015, el billete de 100 acompañó una inflación acumulada del 2.258%. Las estadísticas oficiales del 2016 hablan de un incremento inflacionario del 331%. Otros estudios la duplican.

Maduro hizo su anuncio en medio de nuevas tensiones con la oposición, que considerada caducado el diálogo político, y tensiones con sectores empresariales en las vísperas navideñas. El presidente calificó de  “criminales”  y “saqueadores de la oligarquía” a los dueños de la distribuidora de juguetes Kreisel y ha confiscado casi cuatro millones de sus productos para distribuirlos por sus canales.