VIOLENCIA EN MÉXICO

Un informe rechaza la versión oficial de la matanza de Iguala

Expertos en derechos humanos relacionan el caso con el narcotráfico

Acto por los desaparecidos.

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La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) cuestionó este domingo la versión oficial de la matanza de Iguala y pidió al Gobierno mexicano investigar el traslado de droga como posible móvil del ataque armado contra 43 estudiantes el 26 de septiembre del 2014. Así mismo, solicitó que examinara hornos de cremación que pudieran haber sido utilizados por los agresores.

El grupo de expertos designados por la CIDH para estudiar el caso recomendó «investigar como línea prioritaria del desencadenamiento de la agresión contra los normalistas el móvil del traslado de estupefacientes». Tras seis meses de investigaciones en México, los especialistas pusieron en entredicho la versión oficial y denunciaron numerosas irregularidades en la investigación, entre ellas omisiones, destrucción de pruebas y señales de tortura a detenidos. La exigencia mayoritaria de los expertos es que se continúe buscando a los 43 estudiantes, que siguen teniendo la categoría de desaparecidos.

La fiscalía concluyó en enero pasado que los alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa fueron detenidos por policías de Iguala y Cocula y entregados a miembros del cártel de Guerreros Unidos, quienes los asesinaron e incineraron en un basurero hasta desaparecer su rastro.

Según esta versión, los jóvenes fueron atacados por órdenes del entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca, porque supuestamente iban a boicotear un acto público y después fueron asesinados porque el líder de Guerreros Unidos creyó que eran miembros del grupo rival Los Rojos.

INCONSISTENCIAS

El grupo de expertos indicó que dichas explicaciones era inconsistentes dadas las evidencias, entre ellas que los jóvenes no iban armados, y apuntó a la presencia de droga oculta en uno de los autobuses ocupados por los estudiantes -del cual no se habló en la investigación oficial- para trasladarse como posible móvil de la agresión.

Los expertos de la CIDH también recomendaron investigar hornos de cremación en Iguala y Cocula que pudieran haber sido utilizados para incinerar a los jóvenes, ya que -según un perito independiente- en el basurero no hay pruebas de que dichos cuerpos fueran reducidos a cenizas en una gran hoguera.