TERROR ISLAMISTA EN FRANCIA

Una pareja diabólica

Hayat Boumeddienne, la esposa de Amedi Coulibaly, acompañaba a su marido en los contactos con yihadistas

Amedi Coulibaly y Hayat Boumeddienne.

Amedi Coulibaly y Hayat Boumeddienne.

M. M. / PARÍS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Tiene 26 años, fue criada por los servicios sociales franceses debido a la incapacidad de su padre de asumir la carga de una familia numerosa y perdió su empleo como cajera al comenzar a vestir el 'niqab', el velo integral que solo deja ver los ojos, según recoge el diario 'Le Parisien'. Es Hayat Boumeddienne, compañera sentimental de Amedi Coulibaly, responsable de la toma de rehenes en el supermercado judío de la Porte de Vincennes y la mujer más buscada hoy por los servicios de seguridad franceses y de toda Europa.

A media tarde de este sábado, fuentes oficiales francesas informaron que Hayat había salido de Francia el 2 de enero y había cruzado la frontera turcosiria el 8 de enero con el objetivo, con casi total seguridad, de unirse a las huestes del Estado Islámico, organización a la que el yihadista Amedi dijo pertenecer, en una conversación telefónica con una cadena de televisión francesa, poco antes de ser abatido por la policía el viernes por la tarde.

La infancia de Hayat muy probablemente marcó su personalidad. Tras la muerte de su madre, en 1994, los hermanos mayores dejaron el hogar familiar, mientras que los pequeños, como ella, que por aquel entonces tenía solo 8 años, quedaron al cuidado de los servicios sociales, ya que el cabeza de familia no podía ocuparse.

Ya de adulta, Hayat estaba lejos de ser una compañera sumisa que no se entrometía en los asuntos de Amedi. Más bien lo contrario. Participaba activamente en las actividades del hombre al que consideraba su esposo y en los contactos que mantenía con yihadistas. Según la prensa francesa, estuvo con Amedi repetidas veces durante unos ejercicios de tiro con arco en un bosque del centro de Francia.

También le acompañó cuando visitó, en el sur, a Djamel Beghal, un conocido extremista, también bajo vigilancia, hace ya cuatro años. La explicación que ofreció a los investigadores cuando estos le preguntaron por la razón de tal desplazamiento no revestía credibilidad: Hayat solo les dijo que quería «cambiar de paisaje». 

MARIDO Y MUJER

Hayat y Amedy se consideraban marido y mujer, aunque su matrimonio religioso, celebrado en el 2009, no estaba reconocido legalmente por la República francesa. La relación que mantenían era intensa y sin fisuras. Amedi fue encarcelado en el 2010 por participar en un plan para permitir la fuga del autor de un atentado contra el transporte público parisino en 1995. Nada más salir de prisión, en mayo pasado, Amedi y Hayat volvieron a vivir bajo el mismo techo.

Hayat cortó los vínculos con su padre Mohamed durante largo tiempo, y solo los retomó hace un año, cuando viajó a La Meca en compañía de su compañero. «Para los musulmanes, no sirve viajar a La Meca si no tienes buenas relaciones con tus padres», explicó a 'Le Parisien' una persona próxima a la familia. El padre de familia, feliz de haberse reencontrado emocionalmente con su hija, incluso fue al aeropuerto a recoger a la pareja. Fue la última vez que la vio.