actividad inmobiliaria

El plan inmobiliario de Barajas dobla en inversión al de El Prat

El proyectomovilizará recursos de 2.997 millones de euros y se desarrollara en 920 hectáreas

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El Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas se convertirá en un gran centro logístico y de ocio, gracias al plan inmobiliario que este martes ha presentado el Ministerio de Fomento que contempla una inversión de 2.997 millones de euros en un plazo de 40 años. El plan, que abarcará 920 hectáreas de suelos potenciales, con una previsión de 2,7 millones de metros cuadrados edificables y 140 hectáreas de espacios verdes, impulsará la actividad logística, de carga y aeronáutica, y creará nuevas áreas de servicio a pasajeros, actividad hotelera, de oficinas y de negocio.

En esta ocasión, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna no ha presentado el proyecto como "la mayor inversión europea" que utilizó para describir el proyecto de desarrollo inmobiliario del aeropuerto Barcelona-El Prat, presentado en marzo de este año. De hecho, el 'macrocomplejo' de El Prat, que incluye oficinas, hoteles y plantas logísticas representa una inversión global público-privada de 1.264 millones sobre uno 1,84 metros cuadrados (cerca de 328 hectáreas) que deben desarrollare en 20 años. Se trata así, de un complejo  unas 2,5 veces menor en inversión y tres veces más pequeño en superficie que el proyecto madrileño.

De la Serna, ha destacado este martes, en la presentación del plan madrileño, que la superficie de suelos potenciales es cuatro veces superior a la del proyecto Madrid Nuevo Norte, denominado "Operación Chamartín" y 10 veces a la del madrileño parque del Retiro. Precisamente, el mismo símil que utilizó en la presentación del complejo barcelonés: "El mayor proyecto de desarrollo urbanístico a nivel europeo e implica una superficie equivalente a 1,5 veces la de la 'Operación Chamartín'", comentó ante los empresarios reunidos en la Llotja de Mar de Barcelona.

Diseño flexible

El plan anunciado por Fomento -realizado bajo un diseño flexible, capaz de atraer inversión privada- fomentará la "competitividad económica", destaca, con el objetivo de ofrecer la oportunidad para el desarrollo de actividades de alto valor añadido e innovación para la región de Madrid. De la Serna ha señalado que el proyecto permitirá, asimismo, diversificar el papel del aeropuerto como motor económico y de servicio al ciudadano.

El plan contempla cuatro usos de suelo diferenciados: polo logístico, actividades aeronáuticas, 'airport city' y centro de ocio y actividad comercial, así como un espacio para usos complementarios de estos mismos que se desarrollarán cuando sea necesario. "El éxito de este suelo está asegurado porque las condiciones son inmejorables", ha considerado el ministro antes de avanzar que ya están "formalizando manifestaciones de interés" de varias empresas.

El ministro ha aclarado que son suelos propiedad de Aena que se ponen en explotación para que se incorporen inversores privados. La tramitación urbanística será más ágil que la ordinaria, al afectar a varios municipios y haber parcelas que ya tienen la consideración de solares con la urbanización hecha y disponibles para poder albergar empresas.

Aena encargará este año a un asesor financiero el diseño de la estructura societaria mediante la que propiciar estos desarrollos, mientras que, en el 2019, se habrán constituido los medios a través de los cuales la iniciativa privada y el propio gestor aeroportuario comenzarán los proyectos y, en 2020, comenzarán a construirse los primeros inmuebles.

El plan se desarrollará en tres fases

El<strong> plan se desarrollará en tres fases</strong>, en la primera de ellas, con una duración de ocho años, se construirán 550.000 metros cuadrados, con una inversión de 953 millones de euros, y los desarrollos se centrarán en <strong>usos logísticos</strong> y se iniciará el 'airport city'. En una segunda fase, que durará otros ocho años, se prevé construir 950.000 metros cuadrados adicionales, con una inversión de 739 millones de euros. En una tercera etapa, se consolidará el desarrollo de todas las zonas con la construcción de 1,2 millones de metros cuadrados adicionales, aportando 1.305 millones de euros más de inversión.