PROBLEMAS DE SEGURIDAD

Ciberataque a Apple

La firma de la manzana ha recibido un golpe a su prestigio con la infección de cientos de sus aplicaciones en China La agresión afectó al mayor servicio de mensajería y de pagos

Tienda 8 Compradores en un comercio de Apple en Shanghái.

Tienda 8 Compradores en un comercio de Apple en Shanghái.

ADRIÁN FONCILLAS / PEKÍN

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Entre los pilares más sólidos de Apple figura su reputación de seguridad y China, su segundo mercado global. Ambos han temblado con la infección de cientos de sus aplicaciones de código malicioso o malware en lo que los expertos califican como el peor ataque sufrido por la multinacional de la manzana en su historia. La compañía aseguraba que ayer las había retirado todas de sus tiendas virtuales o App store, pero el episodio ha manchado sin remedio su imagen.

Las aplicaciones infectadas transmitían a servidores fuera del país la información robada a los usuarios de iPhones y iPods como contraseñas o cualquier dato incluido en los blocs de notas. También enviaban alertas de apariencia legal que solicitaban datos sensibles. Los programas habían sido creados con una herramienta bautizada como XcodeGhost que simulaba ser la que utiliza Apple para sus aplicaciones. Había sido descargada por los programadores bienintencionados desde Baidu, el más célebre buscador en China. No es raro que los internautas recurran a servidores nacionales y eludan los oficiales instalados en el extranjero por las trabas de la censura y la desesperante velocidad de descarga.

En el listado de aplicaciones afectadas hay algunas imprescindibles en cualquier móvil chino. Wechat es el equivalente nacional a WhatsApp, pero ofrece muchos servicios además de la mensajería instantánea. Cada día más chinos la utilizan para sus pagos, desde la compra diaria hasta los taxis pasando por transferencias económicas entre sus 500 millones de usuarios. También está Didi Kuaidi, la alternativa china a Uber, que por sus habituales descuentos y la creciente escasez de taxis en las grandes ciudades ha alcanzado rápidamente los 200 millones de clientes. Bancos, aerolíneas o portales de internet han sido también golpeadas. Se desconoce el impacto del ataque, pero su potencial destructivo justifica la alarma. Tencent, propietario de Wechat, reconocía la brecha de seguridad pero negaba la fuga de información.

Sorprende ese escándalo en Apple. La compañía destina muchos medios y personal a examinar la calidad, usabilidad y, especialmente, la seguridad de las aplicaciones antes de permitir su entrada en las App Store. La alternativa de Google, por comparación, se asemejaba a una tierra sin ley hasta hace poco. El consejero delegado de Apple, Tim Cook, las calificó el pasado año de «mezcla infernal de vulnerabilidades». Los piratas no solo han engañado a los vigilantes de Google, sino a los experimentados programadores chinos, quienes creían estar usando el código auténtico.

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