Ronaldo, sin piedad ante el Atlético

Tres goles del jugador portugués rompen al pésimo equipo de Simeone y ponen al conjunto de Zidane rumbo a la final de Cardiff

Ronaldo celebra uno de sus goles frente al Atlético

Ronaldo celebra uno de sus goles frente al Atlético / periodico

ANTONIO MERINO / MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Otra noche magistral de Cristiano Ronaldo, autor de los tres goles de su equipo (3-0), pone al Madrid rumbo a la final de Cardiff en un encuentro en el que solo compareció el equipo Zidane, que pasó por encima del peor Atlético en mucho tiempo. Los de Simeone apenas se sostuvieron en la primera mitad y cuando quisieron reaccionar con GriezmannTorres Correa, les cayó el resto de la tormenta con dos tantos más de Cristiano.

El octavo enfrentamiento europeo entre Madrid y Atlético lleva camino de no cambiar la estadística que habla de un pleno del Madrid, que afrontará el choque de vuelta del próximo miércoles en el Calderón con muchas garantías de volver a meterse en una final por segundo año consecutivo. Lejos de impedirlo, el Atlético volvió a vivir otra pesadilla, esta vez en modo semifinal.

Nadie esperaba un respuesta tan pálida de un equipo que resultó irreconocible y que se vio ampliamente superado en la primera mitad y sentenciado en la segunda con dos tantos más de Cristiano. El jugador portugués, que le había metido cinco goles al Bayern en semifinales, cercenó las aspiraciones del equipo rojiblanco.

PROFUNDO COMPLEJO

No se sabe si fue el efecto de escuchar la música de la Champions o ver que al lado estaba su verdugo en las últimas tres ediciones, pero el caso es que el Atlético comenzó a destilar ese profundo complejo europeo, pese a apuntar que habían superado el trauma de las finales de Lisboa y Milán. Lejos de eso, los rojiblancos se volvieron a encontrar al mejor Ronaldo, que no tuvo piedad del equipo rojiblanco.

El equipo de Zidane dejó atrás todas las dudas de la Liga para manejar los tiempos y marcar lo que iba a ser el choque ya en la primera mitad. Como si pensara que no hay partido de vuelta, tal como pidió Zidane a sus jugadores, el Madrid tuvo el balón y la pausa, mientras que el Atlético respiró más ansiedad que intensidad sin dar sentido a su juego en ningún momento. 

TÍMIDA PRESIÓN

{"zeta-legacy-destacado":{"strong":"El Madrid tuvo el bal\u00f3n y la pausa, mientras que el Atl\u00e9tico\u00a0","text":"respir\u00f3 m\u00e1s ansiedad que intensidad sin dar sentido a su juego"}}

La tímida presión inicial de los de Simeone respondió más a una pose que a una estrategia planificada para ir a buscar al Madrid y hacerle daño en la salida del balón. Modric e Isco apenas pasaban apuros para controlar el centro del campo, esa sala de máquinas donde Casemiro y Kroos ejercen de apagafuegos para conectar con los de delante. Ante esas cualidades, no encontró respuesta el equipo de Simeone, más pendiente de achicar balones de su área que de mostrar sus afilados dientes.

OCASIÓN DE CARVAJAL

Sí los enseñó el Madrid, que no tardó en poner a trabajar al meta Oblak. Lo hizo en un disparo de Carvajal que rechazó el meta esloveno y que aprovechó Benzema para disparar cerca del poste. Más certero estuvo Cristiano, el jugador que marcó las diferencias y que volvió a imponer la dictadura de su calidad. La actividad del portugués terminó por meter en un serio problema al Atlético, incapaz de frenarle. No tardó Cristiano en acudir a su cita con el gol con un cabezazo a un centro de Casemiro (m. 10) que rompió la pizarra rojiblanca.

OCASIÓN DE GAMEIRO

El tanto no despertó al equipo de Simeone, que quedó a expensas del equipo blanco, muy cómodo con el balón y capaz de reducir los recursos de jugadores como Koke, Gabi o Carrasco, que apenas se dejaban ver en la peor entrega en esta Champions, Tuvo suerte el equipo de Simeone de aguantar hasta el descanso con solo un tanto en contra. Lo hizo gracias Oblak, que sacó una mano prodigiosa a un cabezazo de Varane. Un minuto después llegó la única ocasión del Atlético en un mano a mano de Gameiro con Navas, que le sacó el balón al francés. La primera mitad mitad murió con un codazo de Ramos a Lucas que no sancionó el colegiado inglés.

Luego, ni los desesperados intentos del Atlético por subir líneas frenaron el ímpetu del Madrid, que esperó a que Isco, a quien los rojiblancos pidieron la segunda amarilla por una entrada a Koke, dejara su puesto a Asensio para aparcar sus problemas y volver a la carga, ya con Nacho en el campo por la lesión de Carvajal. La tímida reacción rojiblanca iba a morir en las botas de Cristiano. El portugués aprovechó un error de Filipe para disparar con la derecha y volver a batir a Oblak (m. 73). Ese tanto terminó por destruir al Atlético, ya incapaz de reaccionar. Por si el castigo no era suficiente, Ronaldo iba a cerrar su gran noche con su tercer tanto ante un rival más infiel que nunca a su estilo. Un pase atrás de Lucas Vázquez lo remató Cristiano para marcar el terceo y sacar más de medio billete para Cardiff. Era el tanto 21 del portugués en 28 derbis y otra noche para que Oblak y su equipo vuelvan a tener pesadillas con el portugués y con su verdugo en Europa. 

{"zeta-legacy-despiece-horizontal":{"title":"Real Madrid, 3; Atl\u00e9tico, 0","text":null}}