Pacquiao contra Mayweather, el boxeo vestido de dólares

Pacquiao y Mayweather protagonizan este sábado el combate del siglo. Y hasta del milenio. Pese a que son esos adjetivos manidos, no es menos cierto que en este caso es más acertado que nunca. Es la cita del deporte que comportará el mayor reparto económico de la historia. Las Vegas se ha volcado en un combate que trasciende hacia lo social y lo económico hasta lo insultante. El púgil filipino se embolsará la friolera de 80 millones de euros. Será, dicen, el último combate del que ha sido campeón mundial en ocho divisiones, récord difícil de igualar. Mayweather el invencible (47-0) es el ingrediente clave de un cóctel pujilístico de morbo. Él se llevará 120 millones. Lo obsceno de las cifras barajadas, sin olvidar los más de 300 millones en ingresos por la tele de pago y publicidad, anima todavía más el asunto. El mundo estará pendiente de Las Vegas.

Ver el combate entre Mayweather y Pacquiao en directo será privilegio de muy pocos. El precio de las entradas se eleva a múltiplos de miles de dólares. En las primeras filas más de 100.000. Una fiesta de lujo y despilfarro para ver un combate de boxeo que aglutina todos los ingredientes deportivos y de los otros.

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LA HORA DE LOS PEQUEÑOS

Hace ya tiempo que los pesos pesados dejaron de ser el momento culminante de una cita de boxeo. Los pequeños son los que aportan la mejor técnica y el espectáculo. El combate de Las Vegas enfrenta a dos púgiles muy distintos. Pacquiao es persistencia, es reiteración de golpes y precisión técnica. Experiencia a raudales que le permiten la mejor elección estratégica. Es un pequeñín fibroso de 1,69 metros cuyo futuro le llevará a ser personaje importante en su país en la órbita política. Su pasado le avala como escribió Javier Triana para EL PERIÓDICO.

Mayweather le saca cuatro centímetros que parecen más. A su corpulencia superior suma un estilo escurridizo, clave que le ha permitido mantener estampa y rostro a salvo de las drásticas muescas del boxeo. Y es que su técnica agrada a los puristas y deja más frío a los que buscan solo brutalidad. Floyd Mayweather se ha especializado en golpear y eludir golpes, sin buscar obsesivamente el nocaut. Pacquiao,'Pacman', es esa máquina acosadora del contrario, velocidad y precisión. Mawyweather es un especialista del escapismo y del contragolpe, de esa flexión de cintura hacia atrás aparejada a un directo sorpresa.

Los que saben de boxeo prevén que el combate será equivalente al reparto de la bolsa en juego. Una victoria para el estadounidense, por su estilo esquivo que hará resollar hasta a un híperentrenado Pacquiao. Y es que salvo que el filipino consiga el KO será difícil que encandile a los jueces ya que juega en campo contrario.