Trias frena el aparcamiento de Botticelli que rechaza Horta

El proyecto para construir en la plaza de Botticelli, en Horta, el aparcamiento del nuevo supermercado que se prevé instalar en los bajos de un edificio de pisos de protección oficial levantado por el Patronato Municipal de la Vivienda sublevó en febrero a los vecinos de ese barrio y también a los de Montbau, La Clota y el Vall d'Hebron. Los ciudadanos crearon la Plataforma Salvem Botticelli para mantener las actividades cívicas y lúdicas que hasta ahora se realizan en el rocódromo, la pista de petanca y la zona de parque allí existente. La movilización contra la operación que tramita el ayuntamiento incluyó una entrevista con el alcalde. El encuentro de Xavier Trias y la concejala Francina Vila con una comisión de 11 representantes vecinales se celebró el jueves por la tarde y en él el alcalde aceptó suspender el cuestionado plan y anunció el inicio de un proceso de participación para definir los usos del espacio.

A LA ESPERA / El frenazo municipal, confirmado ayer por un portavoz del ayuntamiento, supone «empezar de cero para salvaguardar tanto un lugar con actividad ciudadana como el modelo de comercio de proximidad que la superficie comercial que necesita ese aparcamiento pone en cuestión», según explicó el presidente de la Associació de Veïns d'Horta, Víctor Valls. La plataforma espera ahora que empiece pronto ese proceso para recabar de forma oficial el parecer popular.

Los vecinos rechazan que se quieran ampliar los 900 metros de superficie comercial existentes para dar cabida a un supermercado de mayores dimensiones lo que paralelamente implica tener que disponer de un mayor número de plazas de aparcamiento y justifica acto seguido la ocupación de la plaza. Las entidades emplazan al consistorio a buscar un promotor que no altere ese volumen en beneficio asimismo del comercio de proximidad de esa zona del distrito de Horta-Guinardó.

Los representantes de los vecinos, de los vendedores, de la coordinadora de entidades y del consejo de jóvenes defendieron ante Trias el uso popular de esa plaza situada a un nivel inferior a la calzada que la rodea y calificada urbanísticamente como verde urbano. Valls comparó ayer el rocódromo que hay allí con el de la Foixarda, un referente en el mundo de la escalada deportiva en Barcelona. El líder vecinal enmarcó la decisión de Trias en una política de «poner paños calientes a heridas abiertas pensando tal vez en el 2015», año de elecciones municipales.

El plan que queda congelado implica construir dos plantas de aparcamiento para alcanzar las plazas necesarias para el súper.