Cuenta atrás para una Rambla con menos puestos y más pequeños

Barcelona ultima el plan especial de ordenación de la Rambla con pequeñas modificaciones respecto a la propuesta aprobada inicialmente hace casi un año y medio por el entonces alcalde Xavier Trias. El gobierno de Ada Colau ha tomado nota de algunas alegaciones planteadas por Amics de la Rambla, entre otros, pero en esencia el documento se asemeja al plan heredado. 

Por ejemplo, donde antes había una recomendación ahora se obliga a encajar los quioscos y los puestos de flores entre los alcorques, tratando de ajustar el espacio para optimizar el uso de la via pública. Otra novedad es que ambos tipos de tenderetes deberán disminuir sus dimensiones, que pasarán a ser de un máximo de 4,4 metros de largo, 2,6 de ancho y 2,7 de altura. Los cambios llegan tras meses de paralización que Amics de la Rambla criticó por poner en duda un proceso participativo que se desarrolló durante largo tiempo.

El proyecto, como el de Trias, limita el número de puestos de flores a 16 y el de quioscos de prensa a 11. Asimismo podrá haber un espacio del Museo de Cera y nueve de la ONCE. El documento, además, considera que los quioscos de recuerdos y productos artesanos ubicados en el paseo central quedan fuera de la ordenación del plan "al no responder al interés general". 

ESTE MES

Según ha informado el ayuntamiento, el concurso internacional de ideas para reurbanizar la popular vía barcelonesa está previsto que se licite en otoño y las obras se iniciarán este mandato. El gobierno municipal llevará el plan revisado a dictamen de la comisión de Ecología, Urbanismo y Movilidad y se votará este mes.

La pretensión del plan especial, según el consistorio, es "recuperar la Rambla para los vecinos y las vecinas y conseguir que el vecindario se apropie de ella y que vuelva a convertirse en un paseo".

LAS TERRAZAS

Los quioscos de prensa se distribuirán proporcionalmente a lo largo de las ramblas de Canaletes, de los Estudis, de los Caputxins y de Santa Mònica, sin poder ocupar ningún otro espacio. En el caso de las paradas de ventas de flores, estas solo podrán estar en el tramo de Sant Josep, la conocida como Rambla de las Flors. En ningún caso podrá haber dos quioscos o puestos de flores confrontados entre sí, ni en las aceras laterales y deberán estar a 15 metros delante de las escaleras de acceso de metro y ferrocarriles, a 5 metros de ascensores o 15 metros de edificios catalogados. No se podrán instalar ni en la zona de estatuas humanas ni en la de pintores y se tendrá que evitar que estén enfrentados con las terrazas de los locales.

Las terrazas deberán cumplir las mismas normas de distancias y confrontación y solo se podrán poner en el paseo central y estarán distribuidas entre la Rambla de los Caputxins, la de Santa Mònica y la plaza Reial. El ayuntamiento está trabajando en una ordenación singular para las terrazas de esta vía.