Jabier Muguruza: "Escarbo en la parte oculta del iceberg"

A Jabier Muguruza (Irún, 1960) el acordeón le acompaña desde que tenía 5 años. Un instrumento que le hizo sufrir, dice, hasta que descubrió que tenía "un alma escondida en los fuelles". Como músico ha acompañado a Imanol, al grupo Kortatu (que formaron sus hermanos Fermín e Íñigo), fue parte de bandas como Les Mécaniciens y Joxe Ripiau. Y como cantautor sigue publicando discos intimistas y con alma. Hoy en Reus (Centre d'Art Cal Massó) y mañana en Barcelona (Auditori), programado por Barnasants, presentará 'Beste Hogei (Resistencia, 2013)'.

-Suma 20 años resistiendo.

-Resistiendo y gozando. Si bien es verdad que lo cultural está en una situación muy complicada, con todo lo que eso supone socialmente de pérdida de sensibilidad y espíritu crítico.

-Este 'Beste Hogei' sigue la estela de 'Bikote bat (Resistencia, 2011)'. Textos intimistas a cargo de sus colaboradores habituales.

-Sí. Me dirijo a los oyentes de manera individual y les comunico de forma clara pero sin gritar lo que considero importante en la vida. Para ello me rodeo de grandes poetas en mi misma sintonía vital y literaria, y de grandes músicos, conocedores del concepto que trato de desarrollar, especialmente por Mikel Azpiroz, pianista exquisito, y creador de ambientes en los que se recrean mis composiciones.

-Pero aquí el tema social aparece de forma más evidente, siempre desde su estilo: la sugerencia. ¿Por qué ha querido que estuviera presente?

-Sigo en mi línea intimista. Me ocupo de lo cotidiano (donde creo que se juega la principal partida), de escarbar en la parte oculta del iceberg, esa que de verdad nos mueve y empuja en nuestras actuaciones diarias. Lo que ocurre es que la situación social, especialmente los últimos años, es tan intolerable que les pedí a mis colaboradores que el tema apareciera de forma más nítida.

-Además de Mikel Azpiroz (la columna vertebral del disco), hay media docena de invitados: Uxia, Gorka Benitez, Chris Kase…

-He querido que aparecieran otros colores en el lienzo. Dice mi amigo Zumeta que los colores en su pintura expresan las emociones y yo he pretendido en lo musical, a través de nuevos timbres sonoros, mostrar otras emociones. Lo que no quita que el esquema básico lo hayamos desarrollado otra vez Mikel y yo.

-Otro artista, dada la redonda efeméride de 20 años en la música, hubiera optado por el recurso fácil: un grandes éxitos. ¿Se lo llegó a plantear?

-Gracias, muy amable. Ofreciendo diez nuevos temas en vez de un recopilatorio trato de expresar mi deseo de continuar en el futuro en activo, de continuar componiendo, grabando, defendiendo en directo mis temas... Y es que en eso creo, en esa idea de artesano, de trabajador de un oficio que defendía Atahualpa Yupanqui. Un oficio muy hermoso.

-"He consumido vidas por encima de mis posibilidades", suelta en una canción...

-Se han propagado algunas frases terribles durante estos años de crisis (de estafa, prefiero). La que citas es una de ellas, para mí especialmente detestable, sobre todo viniendo de quienes viene. Deberían de tener un poco más de vergüenza, pero a estas alturas ya conocemos de sobra que ni saben qué es eso. Les contesto que sí, es verdad, que voy a seguir viviendo, lo que me quede, lo más intensamente que pueda. Vivir con intensidad en un sentido profundo, claro. Un sentido del que ellos, pobres, no tienen ni idea.