El circuito de Imola, evacuado por las intensas lluvias que amenazan al GP de F-1

El autódromo de Dino y Enzo Ferrari, el circuito de Imola, también es conocido con el nombre que río que fluye junto a los 4,9 kilómetros de su recorrido, el Santerno. La crecida de sus aguas provocada por las incesantes lluvias de los últimos días amenaza el desarrollo de la primera carrera del Mundial de F-1 en suelo europeo.

Hasta este martes, pese a la copiosa lluvia caída desde la pasada semana, todo parecía transcurrir con cierta normalidad, según informa 'La Gazzetta dello Sport'. Pero en las últimas horas la situación se ha complicado ya que todo el circuito está rodeado de agua y se ha evacuado al personal como precaución a primera hora de la tarde. También se han cerrado carreteras próximas al circuito, en concreto unos tramos que discurren en paralelo, en el margen opuesto del río. Es el que conduce al puente de Tosa, cerca de la curva del autódromo con el mismo nombre.

Muchas las zonas y espacios verdes que se utilizan como aparcamiento de los espectadores durante los días de gran premio están completamente inundados con lo que no se podrán utilizar para un gran premio que se inicia el viernes, con los entrenamientos libres. El césped de la colina de la Tosa, uno de los puntos más buscados por los espectadores por su visibilidad, no estará seco y en condiciones cuando se dispute la carrera. n las carreras de Fórmula 1.

Por precaución, los locales de algunas actividades comerciales situados bajo las terrazas de boxes y la sala de prensa han sido evacuada del hipódromo, incluida la empresa turística IF que alberga los simuladores de F-1, la librería y los dispositivos del hipódromo. La previsiones hablan de que hasta la mañana del miércoles continuarán las precipitaciones y se habla de lluvia para el sábado.