MUNDIAL DE MOTOGP
Exhibición de Márquez (4º) el día que fracasan los favoritos
El líder de Honda roza el podio en el Gran Premio de Japón al cruzar la meta por detrás de Miller, Binder y Martín tras aguantar, a un nivel muy competitivo, en su regreso al Mundial
El australiano de Ducati dominó a placer un GP en el que Aleix Espargaró quedó fuera de los puntos por un problema en su Aprilia, Bagnaia se fue al suelo y Quartararo acabó 9º
Emilio Pérez de Rozas
Periodista
Licenciado en Ciencias de la Información por la UAB. Hijo de Carlos Pérez de Rozas, sobrino de Kike y Manolo Pérez de Rozas, integrantes de una auténtica saga de fotoperiodistas. Trabajó en Diario de Barcelona, fundador de El Periódico de Catalunya en 1978 también formó parte de la redacción en Catalunya del diario El País. Colaborador del diario deportivo Sport y vinculado al departamento de Deportes de la cadena COPE, que dirige Paco González. Emilio suele completar muchas de sus informaciones con sus propias fotos, en recuerdo a lo aprendido junto a su padre y tíos.
Emilio Pérez de Rozas
Honor y gloria al australiano Jack Miller (Ducati), que ganó con enorme autoridad, velocidad y determinación el Gran Premio de Japón, en Motegi, ante 32.152 espectadores, y honor y gloria a Marc Márquez (Honda), que rozó el podio con una carrera impresionante en su regreso a la competición tras su cuarta operación en el brazo, húmero y hombro derecho, no solo superando y aabando por delante de todos los favoritos al título sino superando a muchos de los grandes candidatos a la victoria en el circuito japonés.
Márquez, que había conseguido su 'pole position' nº 91 bajo la lluvia en la jornada de ayer, aseguró que no sabía si iba a poder aguantar ("mi húmero está perfecto, pero me falta musculatura en toda la parte derecha de brazo y hombro") las 24 vueltas de la carrera pero, no solo soportó todo el gran premio a gran ritmo, sino que tuvo arrojo y fuerza para superar a Miguel Oliveira (KTM) para arrebatarle la cuarta plaza.
Ovación a Márquez
Márquez llegó a su boxe y, logicamente, todo su equipo, liderado por Alberto Puig y Santi Hernández, así como por el presidente de Honda, Toshihiro Mibe, que acudía, por vez primera, a las carreras, le recibieron con una ovación impresionante. En ningún momento, el ocho veces campeón del mundo de motociclismo hizo gesto alguno de resentirse de su brazo derecho mientras recibía las felicitaciones de todos los miembros de la escudería Repsol Honda.
"Muy contento, mucho, porque ha sido un fin de semana muy completo para mí, para mi recuperación, para mi regreso, para medirme con los demás, para el equipo e, incluso, sí, para Honda pues hemos podido trabajar todos juntos, hablar con los máximos responsables de la fábrica y trabajar todos en la misma dirección, pues aún nos queda mucho, mucho, por resolver, pero este cuarto puesto nos anima mucho, mucho", señaló Márquez, nada más bajarse de la moto.
"Muy feliz, mucho, pues una cosa es brazo cansado, como lo tengo ahora y otra, muy distinta, brazo dolorido como lo tenía antes de la operación"
Respecto a su carrera, a su aguante, a su exhibición (cuarto, en un gran premio donde los siete primeros no pelean por el título y los favoritos fallaron), el piloto de Cervera (Lleida) reconoció sentirse muy satisfecho y contento porque, en efecto, este gran premio, tras el abandono en la primera vuelta de Motorland (Alcañis, Aragón), era una prueba de fuego. "Todo ha ido muy bien, porque una cosa es tener el brazo cansado, como lo tengo ahora y otra, muy distinta, tener el brazo dolorido, que es lo que me ocurría antes de la cuarta operación. Así que, en ese sentido, un paso más y más tranquilidad, pero aún debo ganar fuerza".
Márquez reconoció que había escogido el neumático blando atrás "porque pensaba intentar apretar al inicio y, luego, sobrevivir como pudiese en las últimas vueltas. La lástima es que, en la primera vuelta, que siempre suele ser mi fuerte, he tenido un problema técnico que, por suerte, he podio arreglar cambiando los mapas de la moto y seguir peleando por perseguir a Miller, Martin y Binder, aunque era imposible tener su ritmo". Eso sí, el líder de Honda se mostró muy orgulloso de "poder forzar, hasta la última vuelta, un adelantamiento, el de Oliveira, para conseguir la cuarta plaza, cosa que no hacía hace muchísimo tiempo".
Victoria de Miller
La carrera tuvo momento impresionantes en cuanto a la emoción. Por un lado, la desgracia que sufrió Aleix Espargaró (Aprilia), tercero favorito al título, cuya moto no funcionó, parece ser que por un problema electrónico, en la vuelta de formación, tuvo que entrar en su taller, coger la segunda moto y, claro, acabó fuera de los puntos (16º). Por otro lado, a tremenda capacidad de Miller para salir y escaparse y ganar su primera carrera del 2023, ya que no ganaba desde Jerez y Le Mans del pasado año. Y, por último, el desastre del principal favorito al título, el italiano 'Pecco' Bagnaia, que, de nuevo, tras una absurda pelea con su compañero de marca Enea Bastianini, acabó en el suelo al intentar pasar a Fabio Quartararo (Yamaha), el campeón y líder que acabó noveno y aumentó hasta los 18 puntos la ventaja sobre Bagnaia, 25 sobre Espargaró y 49 sobre la 'Bestia'.
El error de Aprilia
Aleix Espargaró explicó, al término de su carrera, lo que había sucedido en la vuelta de colocación en parrilla, que arruinó, no solo su carrera, sino la posibilidad, según él, de conseguir la segunda victoria de su vida. "Al ritmo que se ha rodado, me jode un montón lo que me ha ocurrido con la moto 1, pues estaba convencido de que podía ganar este gran premio. ¿El problema?, pues que en la vuelta de reconocimiento, de colocación en parrilla, la moto no pasaba de 5.000 vueltas, de 80 kms/h., porque un telemétrico se ha dejado puesto el mapa de acceso al 'pit lane', que limita la potencia de la moto. Lo he probado todo, todo, en esa vuelta de formación, cambiar mapas, gasolina, reiniciar la centralita, dar gas a tope por si petaba todo y volvía al sitio, pero he tenido que volver al boxe, cambiar de moto y la 2 no estaba para ganar, no. Una lástima porque hoy podía haber ganado, sí".
"Sin el problema eléctrico en mi moto 1, hubiese podido ganar la carrera. Estoy seguro"
El electrónico de Aprilia que había cometido el error, contó Aleix, estaba absolutamente destrozado y el piloto de Granollers no tardó ni medio segundo en consolarle, por supuesto. "Somos una familia, somos un equipo y estas cosas pasas, lástima que suceda cuando nos estamos jugando el Mundial. Nosotros no somos Honda, no somos Yamaha, no somos Ducati, somos Aprilia y todo nos cuesta más. Yo no soy Marc Márquez ni valentino Rossi y tener 200 puntos (194) es impresionante, así que vamos a seguir peleando por este sueño".
Mundial de pilotos: 1. Fabio Quartararo (Francia), 219 puntos; 2. 'Pecco' Bagnaia (Italia), 201; 3. Aleix Espargaró (España), 194; 4. Enea Bastianini (Italia), 170 y 5. Jack Miller (Australia), 159.
Suscríbete para seguir leyendo
- Adiós a los párpados caídos con este sencillo truco a base de aceite de oliva
- Encuesta elecciones Catalunya: El PSC consolida la victoria y Junts refuerza su ventaja sobre ERC
- La FGE sustituye a la fiscal de Madrid por el fiscal superior de Extremadura en la querella de la pareja de Ayuso contra dos fiscales en su caso de fraude
- Sondeo elecciones Catalunya: Los catalanes prefieren un pacto PSC-ERC a otro Govern independentista
- Aviso amarillo por lluvias y tormentas en ocho comarcas de Catalunya este lunes
- Jorge Rey sobre el tiempo que nos espera: "Está muy cerca
- Brutal pelea a puñetazos en un cine lleno de niños donde se proyectaba 'Garfield
- Adiós a otra tienda centenaria de Barcelona: "Cerraremos cuando agotemos las existencias