EL ÚLTIMO GRAN FICHAJE DE MOTOGP

Lorenzo ayudará a Yamaha a destronar a Márquez

Marc Márquez despidió a Jorge Lorenzo de esta manera el día que concluyó el Mundial-2019.

Marc Márquez despidió a Jorge Lorenzo de esta manera el día que concluyó el Mundial-2019. / periodico

Emilio Pérez de Rozas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Yamaha, por fin, ha decidido poner toda la carne en el asador para intentar destronar cuanto antes al poderoso Marc Márquez y su endiablada Honda RC213V, que solo el octocampeón del mundo parece capaz de llevar al límite y arrasar con ella en el Mundial de MotoGP, al haber ganado seis de los últimos siete títulos. La ofensiva de la marca de los diapasones acaba de cerrarse con el anuncio del fichaje, del regreso, de Jorge Lorenzo, primero como piloto probador y, quien sabe, sí, a continuación, como piloto oficial, de nuevo, en el 2021.

Yamaha anunció primero la renovación de Maverick Viñales para los próximos dos años (2021 y 2022). Luego, de inmediato, el relevo, la próxima temporada, del veterano Valentino Rossi (41 años, el próximo 16 de febrero), por el jovencísimo piloto francés Fabio Quartararo, 'rookie' del 2019. Y, ahora, se hace con los servicios de su hijo prodigo, el pentacampeón mallorquín, precisamente el único que ha sido capaz de arrebatarle, en el 2015, la corona al muchacho de Cervera (Lleida).

No hay que olvidar que para poder retirarse (y, en teoría, jubilarse), Lorenzo tuvo que llegar a un acuerdo y recibir el visto bueno de Honda, pues al mallorquín aún le quedaba un año más de contrato, es decir, toda esta temporada, y, por tanto, la firma alada entendió que el pentacampeón no se veía con ánimo de seguir corriendo y le permitió poner punto y final a su carrera en el GP de Valencia, del pasado año. Ahora, los responsables del equipo Repsol Honda, especialmente el expiloto Alberto Puig, que fue quien le contrató, descubren que Lorenzo regresa, en olor de multitudes, al 'paddock' para ayudar a desarrollar la Yamaha M1, gran rival, junto a la Ducati 'Desmosedici', de la Honda RC213V de Marc Márquez.

Una ayuda indispensable

Lorenzo, que con toda seguridad podrá ya pilotar la nueva Yamaha M1 este mismo fin de semana, en las pruebas especiales para los pilotos novatos en la categoría de MotoGP y los probadores de cada marca, en el circuito de Sepang (Malasia), días antes de que los ‘magníficos’ entren en escena del 7 al 9 de febrero, se despidió del motociclismo activo hace apenas cuatro meses, se fue a Bali de vacaciones “solo con billete de ida” y, pasados esos meses, ha decidido volver a la actividad para echarle una mano a Yamaha, a Viñales, a Rossi, a Quartararo y a Franco Morbidelli en un intento desesperado de frenar el dominio del tándem Márquez-Honda.

No es extraño que uno de los primeros en felicitar a Quartararo, con un “te lo merecías, colega” en las redes, fuese Lorenzo, que, tras su desesperada, doloroso, fracasada y decepcionante experiencia a los mandos de la Honda RC213V, ha decidido tomarse la revancha, no despreciar un buen puñado de miles de euros, y regresar al que fue el equipo de su vida, el oficial Yamaha, para, con su tacto, experiencia y sensibilidad, contribuir al desarrollo y mejora de la nueva M1 desde la pretemporada a los sucesivos test que se celebran a lo largo del año.

Honda solo piensa en Márquez

La composición de este auténtico ‘dream team’, que muchos creían no llegaría nunca (Ducati se está estirando de los pelos al haber perdido, de golpe, dos de sus apuestas de futuro, Viñales y Quartararo), podría disparar, en los próximos días, otras renovaciones en un intento, por parte de Honda e, incluso, de Suzuki, de no perder a sus tres grandes valores, el campeonísimo Márquez, cómo no, y los jóvenes ‘azules’ Àlex Rins y Joan Mir.

Todo parece indicar que Honda habría llegado ya a un acuerdo con el catalán Marc Márquez, mientras que Suzuki estaría tratando de que su joven pareja, Àlex Rins (24 años) y Joan Mir (22), renovasen también para el siguiente bienio como ha hecho Viñales y, probablemente, haga Marc Márquez. Hay quien dice que, dada la desesperación de Ducati, Mir podría haberse convertido ya en uno de los nuevos favoritos de la firma italiana de Borgo Panigale para el 2021, aunque los italianos siempre mantienen en la recámara la baza del impetuoso y veloz australiano Jack Miller.

La felicidad de Lorenzo

“Estoy muy contento con la decisión de unirme al Yamaha Factory Test Team", señala Lorenzo en el comunicado oficial del equipo Monster Yamaha. "Siempre planeé permanecer involucrado en MotoGP y regresar al 'paddock', y creo que este es un papel adecuado para mí. Conozco bien al equipo y al M1. La Yamaha realmente se adaptaba a mi estilo de conducción, y será muy interesante volver a encontrarme con mi vieja moto”. siguió explicando el pentacampeón mallorquín, que tendrá como técnico al veterano italiano Silvano Galbusera, técnico del que prescindió Rossi cuando aún restaban trs carreras para concluir el Mundial del pasado año.

"Regresar a Yamaha me trae buenos recuerdos. Aseguramos muchos podios y victorias, y tres títulos juntos, por lo que sabemos dónde están nuestras fortalezas. Quiero agradecerle a Yamaha esta oportunidad, porque esto me permite hacer lo que amo: andar en moto y superar el límite, mientras disfruto de un estilo de vida un poco más tranquilo que el de años anteriores”, continuó explicando Lorenzo.

"Estoy muy motivado para ir a trabajar y no puedo esperar para comenzar a pilotar. Quiero hacer lo mejor para el futuro de Yamaha, y espero que mi experiencia de conducción sea útil para que los ingenieros y pilotos de Yamaha traigan el título de nuevo a Yamaha”, concluye el balear.