Guerra en el este de Europa

Mustafa Nayyem, el hombre que inició la revuelta del Maidán: "Sin las protestas de 2014, Ucrania sería hoy Bielorrusia"

La invasión rusa de Ucrania, en directo

Una década de la revolución del Maidán en Ucrania, la protesta que derivó en guerra

Uno de los líderes de la revolución del Maidán en Ucrania, Mustafa Nayyem.

Uno de los líderes de la revolución del Maidán en Ucrania, Mustafa Nayyem. / CEDIDA

Irene Savio

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La vida del periodista, activista y político Mustafa Nayyem (Kabul, 42 años) tiene esos ingredientes que la asemejan a una novela de literatura eslava. El mundo lo recuerda por haber sido el hombre que en 2014 inició (a través de un convocatoria para salir a la calle publicada en Facebook) el llamado Euroimadán (ЄвроМайдан), la revuelta ciudadana que derivó en la guerra de Rusia contra Ucrania y el fin de los equilibrios internacionales desde el ocaso de la Guerra Fría. Una figura carismática y combativa, cuya biografía es reflejo de la lucha de esa parte de la sociedad civil ucraniana que desde entonces ha intentado alejar a Kiev de la órbita de Moscú y ocupar espacios del poder político en su país, aunque, en este último aspecto en particular, no siempre ha prevalecido.

Con este preámbulo, en esta conversación con EL PERIÓDICO, la segunda con esta periodista después de una previa que tuvo lugar cuando estalló Maidán hace 10 años, Nayyem se mostró cortés y amable, pero también firme en la defensa de la trayectoria de su pasado. El de un hijo de un expolítico afgano que emigró a Rusia después de la traumática salida de Afganistán de las tropas soviéticas (1989) en los últimos compases de la URSS. Después de eso, su familia se instaló en 1991 en su segundo hogar: Ucrania. País en el que Nayyem se formó como adulto, se convirtió en un conocido periodista anticorrupción, y en el que es hoy jefe de la Agencia Estatal ucraniana para la Reparación y Desarrollo de Infraestructuras.

¿Maidan empezó con Facebook?

La gente siempre busca mitos, pero lo cierto es que creo que [la revuelta] se había estado preparando durante años. En los tres años previos a Maidán, el Gobierno de Viktor Yanukovich [presidente prorruso de Ucrania en ese entonces] había restringido enormemente la libertad de expresión, encarcelado a opositores y monopolizado los medios de comunicación. Todo estaba en manos de un solo grupo de personas. Claro está, la magnitud de aquellos días solo la conocemos hoy.

¿Qué pretendía usted cuando escribió ese post?

Puedo decirle que nunca imaginé que vendría tanta gente [a la Plaza de Maidán, epicentro de las protestas]. Al principio nos reuníamos allí, hablábamos y discutíamos... El [entonces] primer ministro, Mykola Azarov, acababa de anunciar que Ucrania no iba a firmar el acuerdo de asociación con la Unión Europea y todos estábamos muy enfadados.

Entrevistar a Nayyem es también oír su optimismo respecto a los logros que Ucrania ha alcanzado en la última década. En particular: el acercamiento a la Unión Europea y la creación en Ucrania de organismos como la Oficina Nacional Anticorrupción, creada pocos meses después de Maidán en octubre de 2014.

De hecho, los manifestantes también salieron a la calle hartos de la corrupción, pero la corrupción en Ucrania persiste. 

Sí, pero si se compara la Ucrania de 2005 con la de 2023, creo que se nota que son dos países diferentes. Trabajé como periodista especializado en corrupción, sé de lo que hablo. ¿Persiste la corrupción? Por supuesto que sí, pero la tolerancia hacia esta corrupción es hoy mucho menor dentro de la sociedad, y existen organismos encargados de detectarla. Sin Maidán, Ucrania sería hoy como Bielorrusia. Antes se conocían las sentencias antes de que los jueces las dictaminaran. Ahora tenemos herramientas [pocos días después de realizarse esta entrevista, se supo de la apertura de una investigación por un intento de soborno de un parlamentario ucraniano contra el propio Nayyem].

Pero también hay guerra. ¿Era inevitable esta ruptura con Rusia? 

Creo que lo que sucedió en 2014 y 2022, este enfrentamiento con Rusia, era inevitable. Sin embargo, fue Rusia la que convirtió este conflicto en una guerra. El tema es que, si miras la historia, durante siglos Ucrania ha luchado por su independencia, no solo contra Rusia, sino también contra los austrohúngaros y el imperio otomano. Siempre hemos luchado.

Nayyem, quien tiene un hermano luchando en el frente, critica aquí a Occidente, al que considera también responsable del actual conflicto bélico por no haber mostrado más firmeza ante Moscú. En particular, cita los antecedentes de la intervención militar de Rusia en Chechenia (1994-1996), en el Cáucaso contra Georgia (2008) y el despojo a Ucrania de la península de Crimea (2014). Incluso atribuye a Occidente la falta de apoyo a la disidencia rusa que se ha opuesto en estos años al presidente ruso, Vladímir Putin.

¿Se ha intentado alguna vez establecer un canal de comunicación con la sociedad civil rusa?

Tengo amigos activistas rusos, los aprecio, pero es obvio que han perdido y han perdido varios años seguidos. Algunos están hoy en Ucrania. Y creo que parte de la responsabilidad recae en aquellos que no los han apoyado, también en los países occidentales, lo que ha llevado a que muchos de ellos estén hoy en la cárcel o en el exilio. Yo, en cambio, no quiero irme, no quiero emigrar y repetir el destino de mi padre.

¿Cómo se imagina su país en otros 10 años?

Es imposible responder a esta pregunta. No sé qué haré la semana que viene, mucho menos lo que haré en un mes o un año. Por supuesto, deseo paz y prosperidad. Pero son sueños. Ahora lo más importante es poner fin a la muerte de nuestra gente.

¿Ucrania celebrará elecciones el año que viene?

Ahora mismo, toda la atención está en la guerra. Todo lo demás no es importante. Necesitamos ganar, y después hablaremos de política. Personalmente, creo que podemos esperar. No es un problema. Tenemos un presidente que fue elegido legalmente y un Parlamento.

El foco está ahora en la guerra de Israel contra Gaza.

Sí, y es muy decepcionante porque necesitamos ayuda. Cualquier retraso en la entrega de asistencia nos afectará y habrá más heridos y muertos en el frente. Los que se benefician son los rusos. Ellos lo habían previsto. Habían anticipado este comportamiento de los países occidentales. Pero, de nuevo, no es la primera vez que esto sucede. Tendremos que resistir.

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