El veredicto de las urnas

Los resultados de las elecciones en Estados Unidos 2022, por cámaras y por estados

Multimedia | Jaque negacionista a la democracia en EEUU

Los republicanos conquistan la mayoría en la Cámara de Representantes, pero los demócratas mantendrán el control del Senado

Proyecciones voto elecciones EEUU Multimedia destacado

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Ricard Gràcia
Idoya Noain
Jose Rico
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Las elecciones legislativas en Estados Unidos han dejado un escenario favorable, pero no aplastante, para el Partido Republicano de Donald Trump y un revés menos grave de lo esperado para el Partido Demócrata del presidente Joe Biden.

En estos comicios de mitad de mandato se renovaban los 435 escaños de la Cámara de Representantes, 35 de los 100 escaños del Senado y 36 gobernadores, además de multitud de cargos clave en varios estados. Los republicanos han conseguido la mayoría en la Cámara baja y se han adjudicado la mayoría de los gobernadores en juego, pero los demócratas mantendrán el control de la Cámara alta.

Estos son los principales resultados del veredicto de las urnas.

Resultados en la Cámara de Representantes

El Partido Republicano ha arrebatado a los demócratas el control de la Cámara baja de EEUU al alcanzar los 218 congresistas que otorgan la mayoría absoluta, frente a los 210 del partido de Biden, y a falta todavía de 7 escaños por adjudicar. Hasta ahora, los demócratas tenían una exigua mayoría (222 congresistas eran demócratas y 213 eran republicanos) en la Cámara baja.

Con este vuelco, el partido de Trump podrá decidir qué leyes se debaten en el Congreso, limitando así la capacidad legislativa de Biden. También pasarán a presidir los comités de la Cámara, lo que les daría margen, por ejemplo, para frenar la investigación del asalto al Capitolio, que recientemente citó a declarar al expresidente Trump.

Resultados en el Senado

El reñido pulso en el Senado se ha decantado a favor del Partido Demócrata, que retendrá el control de la Cámara alta. A falta del escrutinio en Georgia, los demócratas han conseguido 50 senadores y los republicanos, 49. Aunque el escaño que queda por adjudicar se lo llevase el partido de Trump, el voto de calidad de la vicepresidenta Kamala Harris en caso de empate permite a los demócratas blindar su ajustada mayoría. Actualmente, demócratas y republicanos estaban empatados en el Senado a 50 senadores.

En Georgia no habrá desenlace hasta el 6 de diciembre porque ninguno de los candidatos logró el 50% de los votos y la ley electoral del estado obliga a ir a una segunda vuelta en tal caso.

Al conservar el control del Senado, los demócratas podrán evitar, por ejemplo, que los republicanos obstaculicen las nominaciones judiciales de Biden, constriñan su política exterior y dominen también los comités de la Cámara alta.

Resultados de los gobernadores

También el reparto de gobernadores está muy igualado, pero ligeramente a favor de los republicanos, que podrían haber conseguido imponerse en 24 estados frente a los 22 que habrían logrado los demócratas.

Esta votación permite también renovar en cada estado cargos fundamentales para el proceso electoral. Dicho de otro modo, el partido que controle a los secretarios de estado y fiscales generales jugará un papel decisivo en la certificación de las elecciones presidenciales de 2024.

La historia de las 'midterm'

Históricamente, al partido que controla la Casa Blanca le suele ir mal en las elecciones de medio mandato. El partido del presidente ha perdido escaños en todas las elecciones de mitad de mandato desde 2006, una tendencia que se ha repetido tanto con presidentes demócratas como republicanos.

En los comicios de mitad de mandato de 1934, celebrados durante la presidencia de Franklin D. Roosevelt en la Gran Depresión, hubo una diferencia de 219 escaños entre republicanos y demócratas, la mayor del siglo. Entre 1968 y 1990, esta brecha osciló entre un mínimo de 61 y un máximo 147 asientos, pero desde 1994 nunca ha superado los 60.

Las últimas elecciones de mitad de mandato fueron durante la presidencia de Trump. Entonces ganó dos escaños en el Senado, al igual que sucedió en 2002 con George W. Bush en el poder. En otros comicios de este tipo celebrados en los últimos 30 años, el partido del presidente perdió asientos en esta Cámara y solo en 1998 no hubo ningún cambio neto de representación.

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