Aumento de casos

Perú supera los 180.000 muertos por covid-19

•Hasta el domingo, se reconocían oficialmente 66.471 fallecidos durante la pandemia

Un médico revisa radiografías de un paciente con coronavirus en un domicilio de las afueras de Lima (Perú).

Un médico revisa radiografías de un paciente con coronavirus en un domicilio de las afueras de Lima (Perú). / AFP / ERNESTO BENAVIDES

Abel Gilbert

Abel Gilbert

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Perú reconocía hasta el domingo 66.471 muertos por covid-19, una de las cifras más altas de Sudamérica. Pero todo ha sido peor de acuerdo con el Grupo de Trabajo Técnico (GTT) creado por el Gobierno interino para actualizar la cifra de fallecidos. El informe final provoca escalofríos: 180.764 personas han perdido la vida por el virus entre el 1 de marzo del 2020 y el 22 de mayo del presente año.

El comité está formado por integrantes de la sociedad civil y representantes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Instituto Nacional de Salud (INS), el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC), representantes del presidente provisional Francisco Sagasti y el Consejo de Ministros.

Las conclusiones, citadas por el diario limeño El Comercio, ponen en escena la precariedad con la que el Estado peruano se enfrentó a la pandemia. Las Oficinas de Epidemiología no contaron con suficiente personal para recontar las defunciones ni recursos para tener en tiempo y forma con los exámenes de laboratorio y revisar las historias clínicas de los fallecidos. La distancia entre los antiguos reportes oficiales y la realidad obligan a modificar los mecanismos de información y contabilización de las víctimas.

Criterios técnicos

Ante ello, el grupo de trabajo ha propuesto que el reporte de cifras de fallecidos por la pandemia se elabore bajo la definición de "Muerte por covid-19", con la cual se deberán en adelante cumplir con varios criterios técnicos establecidos.

La sociedad peruana atravesó dos olas de la pandemia con muchas dificultades. El alto grado de informalidad de la economía obligó a muchas familias a burlar las medidas de confinamiento. Pero, a la vez, las restricciones fueron trasgredidas por razones estrictamente sociales. Esa desobediencia favoreció la propagación del virus.

De acuerdo con la OPS, en las últimas semanas el ritmo de los contagios se ha desacelerado. La campaña de vacunación es lenta: apenas 3,8 millones de personas se han inmunizado. En este contexto el país organiza el próximo domingo la segunda vuelta presidencial entre Keiko Fujimori y Pedro Castillo.

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