Tensión Washington-Moscú

Las sanciones de Biden tendrán un impacto limitado en la economía rusa

Las sanciones decretadas por Biden afectarán poco el mercado de deuda soberana, ya que los inversores estadounidenses apenas invierten en bonos denominados en rublos

Los expertos creen que Biden busca, con una contundencia no vista en anteriores presidentes, advertir a Putin para que modifique el rumbo, una suerte de última oportunidad antes de aplicar represalias de peso

El presidente ruso, Vladimir Putin

El presidente ruso, Vladimir Putin / EP

Marc Marginedas

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No llegará la sangre al río, al menos en esta ocasión. Pese a la contundencia mostrada el jueves por el presidente estadounidense Joe Biden decretando una nueva ronda de sanciones contra Rusia en respuesta a operaciones de hackeo en EEUU, a las tentativas de interferir en las presidenciales norteamericanas y al supuesto pago de recompensas monetarias a talibanes para matar a soldados estadounidenses en Afganistán, economistas y prensa especializada en Moscú han descartado que dichas medidas puedan tener un impacto significativo en la economía rusa a corto plazo. Coinciden, eso sí, en que la represalia constituye un toque de atención sin precedentes dirigido a Vladímir Putin, algo así como una última oportunidad para enmendar el rumbo en sus relaciones y tratos, tanto con EEUU como con sus aliados de la UE.

La prohibición impuesta a las instituciones financieras estadounidenses de adquirir en el mercado primario bonos denominados en rublos emitidos por las entidades financieras estatales "no será un golpe muy duro" ni para las finanzas ni para la economía rusa, subraya a través del teléfono Anton Liubich, economista, empresario local y autor de 'Dengui' (dinero), un libro sobre política monetaria actual y sus tendencias futuras. "Desde el 2019, existe una prohibición (para los inversores norteamericanos) de invertir en bonos denominados en dólares; los bonos en rublos (objeto del veto estadounidense) están destinados principalmente al mercado interior", destaca. "De hecho, a un inversor norteamericano no le interesa invertir en bonos en la divisa rusa debido, entre otras cosas, a la inflación aquí", justifica.

Impacto moderado

Pese al efecto moderado en el mercado de deuda soberana, es previsible que el Banco Central Ruso quiera apuntalar el atractivo de dichos títulos, elevando el tipo de interés en 50 puntos básicos, hasta alcanzar el 5%. "Debido a que las nuevas sanciones abren un nuevo capítulo a la hora de usar las sanciones financieras contra Rusia, la prima de riesgo en los activos monetarios locales rusos puede permanecer elevada por más tiempo", previene en una nota explicativa a sus clientes Said Sadiqui, de JP Morgan.

Tampoco parece que las sanciones decretadas contra 32 individuos y empresas involucrados en "campañas dirigidas por el Gobierno para influir" en los últimos comicios estadounidenses vaya a constituir un gran lastre para Rusia, ya que en ningún caso se trata de hombres de negocio o entidades involucradas "en las relaciones económicas bilaterales" entre ambos países, según constata el economista Liubich.

La importancia de las medidas de represalia anunciadas por Biden radica sobre todo en la rotunda advertencia que Washington intenta trasladar a Moscú. "Es un mensaje para mostrar que EEUU no está satisfecha, y que los problemas con Rusia no se limitan al pasado", subraya Liubich, en referencia a la elección de Donald Trump en el 2016 y al denominado 'Rusiagate'. Un aviso, además, de una contundencia no mostrada por ninguno de los presidentes estadounidenses anteriores, ni por Barack Obama, ni desde luego por Donald Trump, en las sucesivas crisis que han ido jalonando las relaciones ruso-norteamericanas en la última década. "El único peligro reside en que se trata en que las 'sanciones no duras' se acaban aquí; cuando la Administración Biden imponga nuevas sanciones en los próximos meses, deberá elegir entre variantes duras de facto", escribe la publicación online Meduza en un largo artículo de análisis.