Desarrollo de relaciones diplomáticas

Los Veintisiete avalan el acercamiento a Turquía pero no cierran la puerta a sanciones

La UE promete una agenda positiva a Ankara pero no descarta revertir el proceso si Erdogan renueva sus provocaciones

El presidente turco, Reccep Tayyip Erdogan, en una imagen de 2019.

El presidente turco, Reccep Tayyip Erdogan, en una imagen de 2019. / Reuters

Silvia Martinez

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Aunque tanto la decisión de Recep Tayyip Erdogan de retirar a Turquía de la Convención de Estambul, que obliga a los gobiernos firmantes a adoptar medidas para prevenir la violencia contra las mujeres, como la ilegalización del partido kurdo HDP son “señales negativas”, la rebaja de las tensiones en el Mediterráneo oriental y la actitud más constructiva de Ankara en los últimos meses han llevado a los líderes de la Unión Europea a descartar por el momento sanciones contra Turquía y a comprometerse en el desarrollo de una agencia positiva.

En una declaración aprobada durante el Consejo Europeo, los Veintisiete subrayan su “interés estratégico” por lograr un entorno estable y seguro en el mediterráneo oriental y el desarrollo de una relación de cooperación que beneficie tanto a la UE como a Turquía, un socio con el que siguen dispuestos a entenderse pese al choque continuo entre Ankara, Grecia y Chipre y los continuos giros totalitarios de Erdogan.

“Siempre que se mantenga la desescalada actual y Turquía se comprometa constructivamente (…) la Unión Europea está dispuesta a comprometerse con Turquía de forma proporcionada, escalonada y reversible en una cooperación reforzada en áreas de interés mutuo y a tomar más decisiones en el Consejo Europeo de junio ”, se comprometen.

El documento se basa en el análisis preparado por el alto representante para la política exterior de la UE, Josep Borrell, que lleva un año intentando tender puentes con un socio vital para la gestión de los refugiados o el conflicto con Libia. “Ha habido una evolución buena y positiva en algunas cuestiones. En otras no. Tenemos que seguir de cerca la situación para asegurarnos de que Turquía quiere comprometerse seriamente”, resumía el lunes tras la reunión de ministros de exteriores de la UE.

Unión aduanera y pacto migratorio

Concretamente, los Veintisiete piden a la Comisión Europea que intensifique las conversaciones con Ankara en materia económica para garantizar una aplicación eficaz de la unión aduanera a todos los Estados miembros. También piden al Consejo que prepare el mandato para modernizar la unión aduanera aunque la decisión final estará en manos de los líderes europeos que se muestran dispuestos también a abrir la negociación sobre otras sanidad pública, cambio climático o lucha contra el terrorismo.

Además, también abren la puerta a seguir financiando la acogida de refugiados y a renovar el pacto migratorio porque reconocen que Turquía es un socio crucial en la gestión de los flujos migratorios. “La cooperación con Turquía debe reforzarse, particularmente en áreas como la protección de fronteras, la lucha contra la inmigración ilegal y el retorno de inmigrantes ilegales o los refugiados rechazados”, dicen las conclusiones que alertan de que el estado de derecho y los derechos fundamentales siguen siendo una preocupación porque apuntar contra partidos políticos y medios de comunicación supone “un paso atrás” en materia de derechos humanos y respeto de la democracia. “Urgimos a Turquía a abstenerse de renovar sus provocaciones o medidas unilaterales en violación de la legislación internacional”. En caso de revertir el camino, los líderes europeos no descartan utilizar todos los instrumentos a su alcance, incluidas sanciones.