Crisis migratoria

La policía griega fuerza a los refugiados de Moria a ir al nuevo campo temporal

Las autoridades helenas desalojan la principal carretera de Lesbos, donde los agentes habían confinado a los migrantes tras el incendio de la semana pasada

Operación policial en Moria para trasladar a los inmigrantes de Moria a un nuevo campo tras el incendio.

Operación policial en Moria para trasladar a los inmigrantes de Moria a un nuevo campo tras el incendio. / periodico

Adrià Rocha Cutiller

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La policía griega ha empezado a forzar este jueves a los refugiados del campo de Moria a abandonar la carretera en la que habían sido confinados tras el incendio de la semana pasada para pasar al nuevo campo temporal construido cerca del lugar, que consiste de cientos de tiendas de campaña y que tiene capacidad, de momento, para 5.000 personas.

Al entrar al nuevo recinto, todas las personas pasan un test de PCR. Este campo temporal abrió hace cuatro días, pero hasta ahora los refugiados se han resistido a entrar en él: temen que las autoridades griegas les encierren dentro como ya llevaban encerrados en Moria desde marzo.

En un principio, tan solo unas pocas decenas de personas decidieron mudarse a la nueva instalación, lo que enfadó al Gobierno griego, que amenazó con que solo se procesarían las peticiones de asilo de la gente que entrase al campo, una medida de muy dudosa legalidad. La amenaza, de todas formas, sirvió de muy poco y, al final, Atenas ha optado por la solución rápida: obligar a los refugiados a ir al nuevo campo.

"Más de 1.150 migrantes han entrado este jueves en el nuevo recinto. Seguiremos implementando los tres objetivos que nos propusimos desde el principio: techo, comida y protección", ha dicho el portavoz del Ejecutivo heleno, Stelios Petsas.

Los tres objetivos, sin embargo, son solo para la gente que hace caso. Médicos Sin Fronteras (MSF) se ha quejado de que, durante la mañana del jueves, la policía griega les ha impedido el paso a miembros de la oenegé que querían acceder a la clínica que la organización ha montado en la carretera. Cualquier medio es bueno para hacer que los refugiados vayan al sitio indicado.

"Tras varias horas, los equipos de MSF han podido reabrir la clínica -ha explicado más tarde la oenegé-. El movimiento de personas hacia el nuevo campo continúa. Esperamos que la situación no degenere. Es muy preocupante que durante la operación policial, la prestación de atención médica de MSF se haya visto obligada a interrumpirse".

Recolocación de menores

Esta crisis en Lesbos estalló el martes de la semana pasada: tras una pelea en el campo de Moria, se declaró un incendio que, en pocas horas, de madrugada, devoró por completo el campo, dejando sin cobijo a los 12.000 refugiados que lo habitaban. Se forzó, entonces, a que los migrantes durmiesen en el asfalto, atrapados por la policía, que no les dejaba moverse.

Antes, sin embargo, los 400 menores no acompañados que estaban en Moria fueron enviados al continente griego, a lugares más seguros. Este jueves, lo han sido también otros 250 menores no acompañados más que estaban en los otros campos de las islas griegas cercanas a la costa turca. Estos menores serán después reubicados en otros países europeos, según anunció este jueves la Comisión Europea.