Argentina se paralizó en la quinta huelga general contra Macri

"La mayoría del pueblo argentino nos acompañó", dijo la Confederación General del Trabajo (CGT) sobre la quinta medida de fuerza del movimiento obrero en rechazo al model económico del presidente Mauricio Macri. La CGT le pidió al Gobierno de derechas "acciones inmediatas para frenar esta decadencia". La ciudad de Buenos Aires estuvo casi vacía y en silencio. No circuló el transporte ni hubo clases en escuelas y universidades. Tampoco actividad aeroportuaria, fabril, comercial ni bancaria. "Estamos hartos de las huelgas", se ha quejado la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. "No vamos a permitir cortes (de calles y carreteras con piquetes) y no descartamos el uso de la fuerza pública si es necesario". La protesta de la CGT tuvo lugar cuando se cumple medio siglo de la gran protesta obrera contra la dictadura del general Juan Carlos Onganía que se conoció como "el Cordobazo", y  en medio de una crisis económica solo superada en la región por Venezuela. 

El PIB se desplomó en el 2018 un 2,8% y este año cerrará con un retroceso del 1,8%. La inflación anual llega a 55,8%, la devaluación de la moneda ha superado holgadamente la barrera del 100%, el paro es superior al 10%.De acuerdo con datos oficiales, la pobreza azota a casi el 34% de la población. La cantidad de indigentes se ha duplicado en la ciudad de Buenos Aires durante los últimos tres años. Se calcula qu hay unas 200.000 personas.

 La crispación social está a flor de piel en un país donde los salarios han más de un 20% del poder adquisitivo, mientra que el precio de los servicios públicos (luz, gas, agua)  ha aumentado un 600% de promedio en 36 meses. La fábrica metalúrgica Eitar se ha convertido en el símbolo del deterioro económico. Fundada hace 70 años, se ha visto obligada a cerrar y ha dejado sin empleo a 220 personas. Sus trabajadores se han sumado a las "ollas populares" que se organizarán en los barrios más afectados por la crisis. La Confederación de Trabajadores del Economía Popular (CTEP) tiene previsto llevar a comida al centro de Buenos Aires "para visibilizar la situación de hambre y exclusión que se vive".

Un horizonte negro

Los intentos de Macri de acceder a un segundo período de Gobierno chocan con los datos de la realidad. A largo de los últimos tres años, Argentina ha adquidiro en los mercados internacionales deuda por 100.000 millones de dólares. Gran parte de esa suma se ha utilizado para atenuar el déficit fiscal y financiar la fuga de capitales derivada de la especulación financiera.

Durante el último mes han salidos del país 11.904 millones de dólares. El ministro de Economía, Nicolás Dujovne, había augurado una mejora de la situación a partir de junio. El horizonte recesivo no se ha modificado. La producción de la pequeña y mediana industria ha caído un 10,3% en abril.  Las ventas en supermercados se han contraído en marzo un 14,5%. En Argentina se consume menos que  hace 12 años.

La imagen del presidente acompaña al ciclo de la economía. Llegó a tener una popularidad del 57%. Ahora, las encuestas más benignas lo ubican cerca del 30%. Como contrapartida, se reduce el encono hacia la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Las denuncias de presunta corrupción en su contra pesan mucho menos que las frustraciones económicas. Fernández de Kirchner acaba de provocar un fuerte remezón político al anunciar que acompañará como candidata a la vicepresidencia al exministro Alberto Fernández en las elecciones presidenciales de octubre. 

La nueva ola verde

En vísperas de la huelga general, el  Parlamento fue otra vez rodeado por una multitud que ha vuelto a presionar en favor de una ley que garantice el aborto legal, seguro y gratuito. El proyecto de despenalización del aborto fue derrotado el año pasado en el Senado pero las gigantescas movilizaciones dieron cuenta de un cambio cultural en este país. La llamada "ola verde" es horizontal: incluye a la izquierda, sectores del peronismo e incluso a dirigentes del Gobierno de derechas.